El aguacero castigó con más impetuosidad al área ubicada en el acceso norte de la ruta 35, que desemboca en Juan B. Justo, anegando calles y complicando la situación de negocios y familias.
El fenómeno de este lunes y martes se suma a la tempestad de hace diez días cuando se registró la caída de granizo durante unos 20 minutos, acompañada de vientos huracanados y precipitaciones intensas.
El hecho provocó la voladura de parte del techo del supermercado Sonia, el derrumbe parcial de la cobertura del salón de una herrería a punto de inaugurar y motivó la evacuación de unas 60 familias; varias de ellas aún no pudieron regresar a sus hogares.
Una cancha de fútbol se convirtió en pista de patinaje en 20 minutos de granizo
Asimismo, la tromba causó la caída de eucaliptus y pinos en la entrada principal a la localidad.
Los pluviómetros de la estación meteorológica municipal registraron la acumulación de 220 milímetros de lluvia en los últimos diez días y la caída de granizo en cuatro oportunidades en ese lapso.
Por su parte, el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (Inta) calculó que la racha de mal tiempo afecta ya a unas dos mil hectáreas, aunque aún no evaluó la magnitud de las pérdidas a la producción agropecuaria.
"Nadie recuerda algo así en Huinca; las piedras de los otros días eran del tamaño de las pelotas de ping pong y a la granizada le siguió una especie de huracán", comentó a La Voz Alejandro Acosta, de la radio local Power Station (FM 96.5).
"Y entre ayer y hoy llovió a baldazos", graficó el cronista.