Sociedad Imaginación sin barreras

Niña argentina que padece parálisis ganó prestigioso premio literario

El ladrón de sombras es el quinto libro de Verónica Cantero, que empezó a escribir a los 8 años, y por el que pudo viajar a Italia junto con su mamá gracias a un grupo de allegados que le regalaron el viaje.
Verónica Cantero al ser galardonada
Foto: Verónica Cantero al ser galardonada
Crédito: La Nación
No todos los días se gana un premio literario internacional. Menos aún a los 13 años y con parálisis cerebral. Esto le pasó ayer a la argentina Verónica Cantero Burroni, de Campana, provincia de Buenos Aires, que obtuvo el Premio Elsa Morante para Jóvenes 2016, un prestigioso galardón en Italia, por su cuento "El ladrón de sombras".

"Estoy muy contenta y agradecida; es la primera vez que viajo a Italia y todo es hermoso", dijo a La nación la pequeña escritora, sin ocultar su felicidad por haber recibido la distinción en una ceremonia, en Nápoles. Verónica, que tiene una parálisis cerebral que le afecta la motricidad, viajó junto a su madre, Cecilia Burroni. Por el primer puesto del certamen, compitió con dos firmas reconocidas: el periodista Andrea Tornielli, autor del libro-entrevista con el Papa El nombre de Dios es misericordia, y la escritora Lia Levi, por El brazalete. Las tres obras fueron seleccionadas por un jurado "científico" presidido por la novelista, dramaturga y guionista italiana Dacia Maraini, junto a un jurado popular integrado por alumnos de escuelas de la región de Campania (cuya capital es Nápoles).

Si bien los tres autores son considerados ganadores, el público distinguió el libro de Verónica con un premio especial. "Estoy feliz porque ella venció: es lo que yo esperaba -admitió el vaticanista Tornelli, compañero y virtual competencia en la final frente al voto popular-. Es importante darles el valor que merece su mirada a la realidad de la vida y a su fantasía. Esto fue reconocido no sólo por parte de la jueza Dacia Maraini y los otros escritores, periodistas y críticos literarios, sino también por parte de los niños y jóvenes estudiantes que eligieron su libro como el mejor."

"Ya estábamos muy contentos con que Verónica estuviera en la terna y fue una enorme sorpresa cuando anunciaron que fue para ella el superpremio", contó Cecilia, la mamá de la joven autora, que es licenciada en Psicología, tras la celebración en el antiguo Bagno Elena de Nápoles, con vista al mar, de la que participaron más de 800 chicos, que leyeron los libros y votaron, detalló. El premio, que consta de 1500 euros, le fue entregado por Maraini, todo un honor.

¿Qué cuenta la historia galardonada, publicada en Italia por Edizioni Di Pagina? "Se trata de un chico que por necesidades económicas roba sombras. Y hay uno de sus compañeros de clase que se da cuenta de que hace eso por necesidades económicas e intenta ayudarlo para que no robe más sombras", resumió la autora, entusiasmada.

La historia antes de El ladrón. . .

El ladrón de sombras es el quinto libro de Verónica, que empezó a escribir a los 8 años, y por el que pudo viajar a Italia junto con su mamá gracias a un grupo de allegados que le regalaron el viaje. Su maestro en el arte de escribir fue el escritor y periodista Alver Metalli, también amigo de la familia, que vive en la Argentina.

Morocha, sonriente y vivaz, desde su nacimiento, el 3 de junio de 2002, Verónica tiene -como Francisco, uno de sus seis hermanos- una parálisis cerebral que le afecta la motricidad. De hecho, se mueve en silla de ruedas y antes de viajar para recibir su primer premio internacional, este año se sometió a una intervención quirúrgica. "Por la cirugía hice hasta ahora la escuela en casa, estoy en tercer año del secundario del Colegio Santo Tomás de Aquino de Campana, pero el próximo lunes vuelvo a clases", contó.

Actualmente, además, está escribiendo su sexto libro. "Es una aventura entre seis amigos. Uno se entera de improviso de que los padres que tiene no son los suyos verdaderos", anticipó. "Por ahora se llama Una historia en la costa, pero no es el título definitivo, quiero otra cosa, más original", agregó, al revelar, ante una pregunta, que suele escribir sus obras en la computadora. "Aunque las ideas las escribo a mano en un cuadernito y después reúno todo."

Antes de regresar a Campana, su ciudad, pasado mañana, para festejar allí junto a su papá, hermanos, familiares y amigos, su cumpleaños número 14, mañana Verónica tendrá otra cita importante: el Papa. "Voy a ir a la audiencia general, le voy a dedicar un libro y espero dárselo en mano", adelantó.

Inspirado en la gran escritora italiana Elsa Morante (1912-1985), el premio que ganó ayer suele centrarse en temáticas sociales y políticas juveniles, como la integración, las diversidades, las dificultades del mundo de la infancia, la dispersión escolar y la posibilidad de soñar. En ediciones anteriores lo recibieron reconocidos autores, muy cercanos al mundo de los adolescentes, como Roberto Vecchioni, Gennaro Matino, Luis Sepúlveda, Sabatino Scia con Alda Merini, Antonella Ossorio, Simone Cristicchi, Mauro Giancaspro, Rita Levi Montalcini, Kledi Kadiu, Giovanni Allevi y Peter Cameron.

Una escritora a cuatro manos

El periodista y escritor Alver Metalli contó a La Nación el método de trabajo de Verónica Cantero: "Mantenemos una conversación sobre la historia; luego ella escribe en el teclado mecánico de la PC y si se traba o hay un pasaje que no es claro, retomamos el diálogo. Cuando se cansa, generalmente a la media hora, yo le presto los dedos y ella prácticamente me dicta".
El comentario no será publicado ya que no encuadra dentro de las normas de participación de publicación preestablecidas.

NOTICIAS DESTACADAS