Sociedad Un delito y dos muertos

Buenos Aires: Murió el bombero baleado por ladrón que escapaba de la Policía

César Mateos (53), bombero y cerrajero, luchó por su vida por casi dos semanas, luego de que un delincuente le diera cuatro tiros, tras protagonizar un raid delictivo junto a tres cómplices. Por este hecho, también murió un policía.
César Mateos era bombero y cerrajero en Longchamps. (Facebook)
Foto: César Mateos era bombero y cerrajero en Longchamps. (Facebook)
Le dieron cuatro tiros, dos en la cabeza, y la peleó por casi dos semanas, pero su cuerpo no aguantó. Murió César Mateos (53), el bombero baleado por un ladrón que le quiso robar el auto para huir de la Policía, luego de una persecución trágica que se extendió de Banfield a Longchamps y en la que también falleció un policía.
Desde ese lunes 16 de mayo a la tardecita en que fue herido de gravedad, el Pelado, como le decían sus amigos y familiares, estaba internado en una clínica de Adrogué luchando por su vida. Murió ayer a la tarde, luego de haber sido intervenido nuevamente el miércoles pasado por un derrame cerebral, según pudo saber Clarín.

Dueño de una cerrajería en Longchamps, tras colaborar con los bomberos voluntarios de Glew, hacía más de dos años que Mateos había pasado al cuartel de Guernica. Allí serán velados sus restos desde las 20 y mañana será inhumado en el cementerio Monte Paraíso de Longchamps.
El bombero no fue la única víctima de un raid delictivo: dos días después del hecho falleció el policía Maximiliano Garay, de 23 años y papá de un bebé de meses, quien había quedado muy grave tras salir despedido del patrullero del CPC de Almirante Brown que chocaron los ladrones al intentar escapar.
Todo comenzó a las 15 del lunes 16 de mayo en Banfield y finalizó dos horas después en Longchamps. Por el caso, hay un ladrón muerto -tenía 19 años y fue quien baleó a Mateos-, otro que aún permanece prófugo y dos detenidos, imputados por el fiscal Gerardo Mohoraz, de la UFI en lo Criminal N°15 de Lomas de Zamora, por "homicidio agravado criminis causa" y "robo agravado".
La trágica zaga se inició cuando cuatro delincuentes robaron una Renault Sandero Stepway gris. Luego, la banda se hizo de una Dodge Ram en Almirante Brown. Y, divididos dos por auto, huyeron. Pero la Policía los detectó y comenzó la persecución.
Fue el patrullero del CPC de Almirante Brown en el que iba Garay y otro agente el que le cortó el paso a los ladrones. El choque de la Dodge con el móvil fue tan violento que el agente de la CPC salió despedido del vehículo. Allí fue capturado uno de los ladrones que hoy está detenido. Su cómplice huyó a la carrera mientras los dos que iban en la Sandero Stepway escaparon.

Fue el ladrón que huía a pie quien se cruzó con el bombero justo cuando estaba a bordo de su Renault Kangoo. Fuentes del caso sospechan que Mateos se resistió porque el delincuente no tuvo piedad: le dio dos tiros cuando aún estaba dentro del vehículo, lo empujó hacia el asfalto y le tiró dos veces más. Luego, el delincuente se subió a la camioneta e intentaba escapar cuando se enfrentó a la Policía: murió en el auto del bombero.
A Mateos lo trasladaron al hospital Meléndez de urgencia, y luego, fue derivado a la Clínica Ima de Adrogué. Allí estuvo internado los últimos 13 días, hasta que ayer a la tarde falleció.
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