De la marcha participaron muchos compañeros de colegio de Gisela, amigos, docentes, directivos y vecinos en general que se solidarizaron con el dolor e incertidumbre de la familia. Partieron desde la escuela ubicada en 9 de Julio entre Eva Perón y Supremo Entrerriano e hicieron el trayecto que habitualmente realizaba la joven para estudiar en la "ESJA" Padre Fidel Oliver hasta el lugar donde se la vio por última vez.
Al término del recorrido una madre nuevamente pidió que Gisela López aparezca, un emotivo cierre con lágrimas y abrazos eternos de familiares y particulares que brindaron su incondicional apoyo.