El operativo fue ordenado por el fiscal Martín López Zavaleta a raíz de una denuncia sobre violación de clausura en un inmueble ubicado en José Martí, que tenía además en su haber tres violaciones de clausura, una de ellas por trata de personas, informó esa dependencia.
Efectivos de la Policía Metropolitana comprobaron que en esa propiedad de dos pisos funcionaba, detrás una falsa pared, un taller textil de tamaño considerable, por lo que se procedió a su allanamiento junto con personal de la Agencia Gubernamental de Control porteña.
"Estas causas merecen especial atención porque es una actividad que entraña mucho peligro si no cuenta con las habilitaciones correspondientes", sostuvo López Zavaleta.
Una vez adentro se pudo constatar que el taller estuvo funcionando hasta el ingreso de la policía ya que las máquinas de coser estaban calientes, además de encontrar un amplio depósito con prendas terminadas y a medio confeccionar y habitaciones donde vivían los trabajadores, dijeron las fuentes.
"Como resultado del operativo se secuestraron 40 máquinas de coser, mesas cortadoras, rollos de telas, prendas terminadas y al menos 60 bultos de recortes y retazos, de forma que el taller no vuelva a operar", agregó el Fiscal de Cámara, Martín Lapadú.
En el lugar no se encontraron trabajadores, por lo que estiman que escaparon por la puerta trasera del inmueble, ubicada por la calle Quirno.
