Pietroboni fue señalado en una lista entregada al juez federal Sebastián Casanello por Lázaro Báez como uno de "los que debían ser investigados por haberse beneficiado en negocios con el Estado en la obra pública durante el periodo kirchnerista", publicó Uno.
Inmediatamente, el empresario había salido al cruce del empresario patagónico, hoy detenido, y había argumentado: "Esa lista es engañosa".
También había afirmado que, durante la década de gobierno de Néstor y Cristina Kirchner, había sido presionado para no presentarse a las obras en que licitaba Lázaro Báez y explicó mecanismos mediante los cuales éste hizo su fortuna.
Además había reconocido un "contacto fluido" con el exgobernador Sergio Urribarri aunque había negado que se lo hubiese beneficiado en la obra pública entrerriana. También había dicho que los sobreprecios para "comisiones" eran "una condición del mercado".
La obra pública
Hace un par de semanas, el empresario santacruceño Lázaro Báez presentó un escrito ante el juez Casanello con un listado de los 36 empresarios y compañías presuntamente más beneficiadas con la obra pública durante el kirchnerismo.Una de ellas es la empresa entrerriana de construcción Pietroboni, cuyo titular Víctor Pietroboni reconoció en diálogo con Radio 9 Digital que existían los sobreprecios.
El audio fue reproducido anoche en el programa A dos voces con Marcelo Bonelli y Edgardo Alfano, y la presencia de Jorge Lanata, quien señaló que estas maniobras ya las había denunciado tiempo atrás, asegurando que los sobreprecios ya eran calculados y sumados a las licitaciones.
"Nosotros no teníamos ninguna posibilidad de presentarnos en licitaciones donde él competía porque recibíamos llamados de las primeras autoridades, desde la Secretaría de Obras Pública de la Nación, por indicación de la señora presidenta, de que no podíamos molestar en las obras donde se presentaba Lázaro Báez", dijo.
"Él era el que estaba con estas obras y con diálogo directo con la Presidencia. Esas obras además tenían un sobreprecio y por encima de eso les certificaban obras no ejecutadas. Hacían 50.000 metros cúbicos de terraplén y les pagaban 200.000", indicó.
"Había otro ítem que era Remediación de Yacimiento, que era arreglar las canteras que ellos explotaban. Quedaba un pozo, entonces había que arreglar los bordes, los taludes, para que no se forme una laguna. Es un trabajo que se hace en 10 días y que puede costar 800 mil pesos por cada cantera. Cobraban 10 millones de dólares, una cosa indescriptible", agregó.
"Es la única manera de que el tipo pudiera tener 200 estancias más la guita que tiene escondida", añadió.
