Yuan vive en Villa Urquiza, y habita la Ciudad de Buenos Aires hace 30 años. Tiene su local en el barrio porteño de Barrancas de Belgrano, en el barrio chino. Bajo el slogan de "sigamos con el cambio", se lo puede ver en anuncios junto a Rodríguez Larreta en muchos supermercados chinos de la Ciudad.
Pero "Fernando" no está sólo en el negocio vitivinícola: también importa peluches a la Argentina directo desde su país, y los ubica en negocios del barrio de Once. Y, además, tiene un restaurante de carne en Beijing: se llama "El Obelisco".
En la ciudad de Buenos Aires, en cambio, Jian Ping es más conocido por su negocio de regalería y juguetería de la calle Larrea al 300, en el barrio de Once. Ting Shen SRL es el nombre oficial de su empresa, una reconocida importadora de peluches.
A Macri se lo presentaron en 2008, durante un viaje del jefe de Gobierno a China, en una cena con empresarios en Pekín. Desde entonces, ambos han mantenido un discreto contacto. Ya en la Argentina, Rodrigo Herrera Bravo, presidente de la Fundación Diálogos Estratégicos, docente en la Universidad Nacional de Lanús y ex subsecretario de Coordinación de Planes Estratégicos del gobierno porteño, ofició de enlace político entre Jian Ping y el jefe de gobierno, a quien había comenzado a respetar durante su gestión como presidente de Boca Juniors, el club de sus amores. Tiempo después, y en el marco de la Expo Shanghai 2010, Fernando circulaba por la Legislatura porteña en calidad de vicepresidente de la Cámara de Producción, Industria y Comercio argentino-chino, y mantenía reuniones frecuentes con el entonces presidente de la Comisión de Turismo y Deportes de la Legislatura porteña, Jorge Garayalde.
El candidato chino de Macri fue durante años un referente de otra de las entidades empresarias bilaterales, la Cámara de Comercio Chino-Argentina, donde ocupó el cargo de vicepresidente cuando Julio Werthein fue electo presidente. Y permaneció en el cargo aún durante el primer período de Carlos Spadone, otro de los referentes del comercio bilateral con el gigante asiático. Actualmente no ocupa ningún cargo en dicha institución. Entre sus más queridos tesoros guarda un premio entregado por la embajada china al "Éxito del inmigrante", una excepción si se tiene en cuenta que fue el primer chino residente de la Argentina en recibirlo.