La novena Reforma Impositiva de esta gestión, que eximió a industriales de pagar ingresos brutos, redujo el aporte patronal a la Ley 4035 y otorgó beneficios impositivos a clínicas y sanatorios privados, demuestran que hay un cambio de eje del gobernador de la provincia, dijo Gálligo , quien señaló que con la norma sancionada a fines del 2013 se había logrado salir de la lógica neoliberal, donde los sectores de la industria no tributaban, pero con la Ley 10323, que retrotrajo parte de la modificación realizada en 2013 sobre los sectores más concentrados de la economía, el gobierno dio marcha atrás y exceptuó a las industrias nuevamente, lo que es lamentable.
En ese sentido, el dirigente indicó que los técnicos de CTA realizaron un análisis sobre las consecuencias del retroceso en la política impositiva en cuanto a las industrias, donde se devela que no son 8 millones de pesos de lo que se le exceptuó sino 25 millones de pesos.
Además, indicó que según el muestreo, que va desde 1991 a 2013, quien más trabajo generó son los sectores de servicios y los comercios y bajo la excepción que tuvo la industria nunca generó grandes fuentes de trabajo, y advirtió que todas estas empresas que exceptuó Urribarri en Entre Ríos en las demás provincias tributan, es decir, cuando toman el coeficiente, cuando toman como tributo de costo el impuesto, lo toman en general de todo el país, en relación a las ganancias que tuvieron estas empresas en estos últimos diez años.
La decisión del Ejecutivo entrerriano representa políticamente para Galligo que hay un cambio de eje del gobernador, por lo que se realizarán medidas de fuerza el 24 de noviembre, pero aclaró a AIM que desde la CTA oficialista están dispuestos a seguir dialogando.