Al explicar la lógica de su proyecto, Viale plantea que el Estado provincial debe jugar un rol activo en la determinación de la calidad del producto y la transparencia del mercado, ya que estas cuestiones contribuirán al desarrollo sostenible y equitativo de la actividad. De igual manera, pero hacia adentro del sector, se debe defender el eslabón más débil de la cadena, evitando que el control de la calidad del producto sea efectuado de hecho por la industria láctea y que el productor desconozca el precio de su trabajo hasta haber comenzado otro mes de entrega imposibilitándolo así de efectuar transacciones más favorables.
El socialista remarca que, en la actualidad el congelamiento de los precios perjudica principalmente a los medianos y pequeños tamberos. La Secretaría de Comercio Interior sólo autorizó el pago de $3 por litro, cifra que no alcanza para cubrir los costos de producción del litro de leche de acuerdo con los cálculos de los principales analistas. Según la revista Márgenes Agropecuarios, en su edición de agosto de este año, destaca que el costo en dólares del litro de leche es de u$s 0,38 lo que equivale (tomando un dólar a $ 8,32) a $ 3,16, lo cual no sólo dejaría sin margen para que viva el tambero, sino que estaría arrojando un quebranto de 16 centavos por litro.
El legislador explicó que con la sanción de este proyecto de ley, se simplificarán las gestiones referidas a los integrantes partícipes del sector, además de transparentarse y formalizarse la cadena comercial láctea, tendiendo a que se minimicen los conflictos y se complemente con las normativas nacionales para que asegure el desarrollo sostenible y equitativo de la actividad; sin olvidar, el avance en el sentido de dar cumplimiento al Acta Acuerdo firmada en el 2003 que, sin duda, potenciará una actividad muy importante para el desarrollo productivo, económico y social.
En los fundamentos del proyecto, Viale expresa que esta iniciativa, justamente, encuentra su antecedente primero el 8 de mayo de 2003, cuando se aprobó ese Acta Acuerdo entre los Productores Lecheros, la Industria Láctea y los Gobiernos de las Provincias de Córdoba, Santa Fe, Entre Ríos, Buenos Aires y La Pampa y la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentos de la Nación; allí se acordó, entre otros temas, la creación de registros de tambos en cada una de las provincias, mejorar la transparencia comercial de la cadena láctea, establecer una leche de calidad de referencia, sistemas de gestión de análisis de leche cruda, así como dictar las normas jurídicas necesarias para el ordenamiento del sector.
A más de 11 años de la firma del Acta Acuerdo, nuestro país en el actual ciclo productivo volverá a mostrar una nueva caída en la producción, después de una década de producción estancada entre los 10.000 y 11.000 millones de litros entendemos que el estado no debe permanecer inerte, justificó el legislador.
Entre los aspectos más importantes del proyecto de ley están los siguientes:
Conforma un registro de productores primarios y de las industrias lácteas que compran leche en nuestro territorio.
Establece que las industrias lácteas deben informar cuales son los estándares de composición y calidad higiénico sanitaria con que califican la materia prima que compran y las bonificaciones y castigos que aplican sobre la Leche de Calidad Estándar, sus modificaciones y actualizaciones.
Determina que las empresas que compran leche en la provincia de Entre Ríos para su procesamiento deben informar el precio final que abonaron en el mes anterior por el Kg. de Grasa Butirosa y el Kg. de Proteína con las condiciones higiénicas sanitarias definidas para la Leche de Calidad Estándar y el valor que toma un litro de Leche de Calidad Estándar con las mismas condiciones higiénico sanitarias. Además deberán informar los promedios de los valores composicionales y de calidad higiénico-sanitarios de la leche que recibieron en el mes anterior.
Cualquiera de las partes (empresas industriales o productores primarios) podrá pedir la formalización de las condiciones de compra venta a través de lo que se denominará Acuerdo Lácteo. En el mismo se determinarán: los estándares composicionales de la leche y sus condiciones higiénicas sanitarias sobre las que se harán las bonificaciones y castigos; los rangos y magnitudes de éstas; las condiciones de pago, fechas y plazos; los protocolos de muestreo periódico, y en caso de controversia, los domicilios para realizarse notificaciones. Asimismo, la formalización del Acuerdo Lácteo permitirá la intervención de un tercero imparcial para dirimir diferencias que necesiten laudos.
Crea un registro de los laboratorios habilitados por el INTI para el análisis y pago de la leche cruda, los que serán aceptados como integrantes de la Red de Laboratorios Provinciales, que podrán ser tenidos en cuenta en la conformación de acuerdos lácteos.
