Se trató de Ulises Andrés Ferreyra alias "Pitu o Pitufo" de 21 años con instrucción primaria incompleta y nacido en Concordia, el cual acordó en un juicio abreviado, la pena de 16 años de cárcel al declararse coautor material y penalmente responsable del delito de robo con resultado de muerte.
Mientras que Gastón Maximiliano Franco de 18 años, analfabeto y también oriundo de Concordia pero sin antecedentes, pactó una condena de nueve años de prisión efectiva al reconocerse como autor material y penalmente responsable de los delitos de robo agravado por las lesiones causadas y por el uso de armas de fuego en concurso real con tenencia ilegal de arma de guerra.
Según consta en la sentencia, éste último, luego del fatal asalto en el que resultara herido en la cara, cometió luego otro robo en la ciudad de Concordia; por lo que esta condena fue por la acumulación de causas.
El fallo al que TalCual tuvo acceso, lleva la firma del Tribunal unipersonal de Juicio y Apelaciones en la ciudad de Concordia presidido por el Vocal Interino Dr. Alberto Funes Palacios, e intervinieron la Dra. María Josefina Penón Busaniche, Fiscal Suplente de Federación y José Emiliano Arias, Fiscal de la jurisdicción de Concordia, el Dr. Ignacio Doubell, Querellante Particular, el Dr. Joaquín Garaycoechea, en representación del Ministerio Pupilar, los Dres. Rafael Briceño y Diego Briceño, Defensores Técnicos de los imputados.
Sobre el fatal asalto
Tras reducir al dueño de casa, Juan Alfredo Pezzelatto y su esposa Susana Teresa Burna en una de despensa de la vivienda, se vieron sorprendidos por el hijo de estos, Juan Alberto Pezzelatto, quien al advertir la situación, resultó baleado en su pierna izquierda.
Don Pezzelatto repeló el ataque y efectuó un disparo de arma de fuego con un rifle aire comprimido hiriendo en el rostro a Ferreyra, por lo que éste, lo ultimó de un balazo con un arma de fuego calibre 22.
Los ladrones subieron al automóvil en el que habían llegado y escaparon hacia la localidad de Concordia, donde el delincuente herido en uno de sus pómulos ingresó al hospital local sin poder explicar sus lesiones, por lo que la policía rápidamente supo que era uno de los miembros de la banda que atacó la propiedad de los Pezzelatto y lo detuvo.
