Según la denuncia, le ofrecían dejarla libre "si firmaba unos papeles". Además, se indicaba que "la mujer pidió auxilio en forma telefónica a dos conocidas, que alertaron a la Policía. Cuando los efectivos se hicieron presentes en el lugar, comenzó a gritar que quería su libertad porque ahí se iba a morir. La vio un doctor y una psicóloga, y marcaron que no tenía problemas psiquiátricos, sino algún olvido propio de la edad y de la situación de stress".
"Estaba todo orquestado entre ella, una sobrina de esta mujer y un abogado de la ciudad de Paraná", resaltó el funcionario judicial.
La versión de la mujer denunciada
María Bin fue acusada de mantener cautiva a su hermana, Mabel Bin. En diálogo con el programa Códigos, que se emite por Elonce TV, se defendió y asegura que "lo que se dice no es así en ningún aspecto".En ese sentido, contó que "mi hermana tiene Alzheimer avanzado. Al diagnóstico nos lo dio un neurólogo que nos dijo que estaba al borde de la locura y por eso recomendó internarla, pero a nosotros nos dio lástima. La trajimos a mi casa porque la encontramos en muy mal estado. Acá vivo hace 29 años y tengo todas las comodidades como para que esté con nosotras. Nunca estaba sola, la cuidaban cuatro personas día y noche. Tenía médicos y todo lo que ella precisaba".
Mabel le dio un poder a su sobrina Lorena, hija de María, para que le maneje todos sus bienes. "Ella es mi hermana mayor, somos las únicas dos que quedamos. Ella estaba viviendo en zona rural de Nogoyá. Su marido falleció hace tres años y le dejó la estancia con bastantes hectáreas de campo. Mi cuñado repartió todo antes de morir, pero la rabia que tiene su hijo y esposa es que a la estancia se la dejó a mi hermana. El problema viene por ahí", relató a Elonce TV.
Contó que "luego vino un grupo del Juzgado con un médico, hablaron con ella y le dijeron que tenía que ir a declarar a Fiscalía. Se la llevaron. Alguien denunció que había alguna situación irregular, pero es mentira. Se dijo que le hicimos firmar poderes y eso no es así. Lógicamente hay personas que intentaron aprovecharse de ella, estafarla, y son los de Nogoyá".
"En la estancia ahora no hay nadie ahora porque mi hija Lorena puso candado, ya que antes habían roto todos los portones y cerraduras con un martillo. Desaparecieron muchas cosas", agregó.
Explicó que el día que la Policía se acercó al domicilio, atendió una de las empleadas y no los dejó entrar porque no estaba su hija Lorena. "Querían entrar a la fuerza y nos opusimos. Ellos venían a ver el estado en el que se encontraba ella", dijo.
Actualmente, Mabel vive en otra casa con una mujer con la que trabajó muchos años. Su hermana, María, consideró que "ahora está en un lugar inhóspito. El juez que la vio dijo que estaba entera y en sus cabales". Elonce.com
