Policiales Juicio

Narcotráfico: Testigo comprometió la situación de policías federales imputados

Tanto los gendarmes como un policía federal reconocieron las voces de sus compañeros -ahora imputados- en escuchas de conversaciones telefónicas que mantuvieron con Mario González, sindicado como jefe de una banda de narcotráfico.
Seis testigos pasaron este miércoles por el Tribunal Oral Federal de Paraná, en la causa que ventila el accionar de una banda narco que tenía protección de funcionarios de la Policía Federal, de Gendarmería y la división de Toxicología de la Policía provincial. Tres gendarmes testimoniaron sobre el trabajo que desempeñaba Carlos Francisco Acosta, jefe de Investigaciones del Escuadrón 4 de Gendarmería Concordia. El ex jefe de Toxicología de la Policía provincial, Antonio Alsina; y el ex segundo jefe del Cuerpo de la Jefatura dela Departamental Concordia, Alcides Jesús Arce hicieron lo propio en torno al trabajo que desarrollaba el comisario inspector Alberto Mario Núñez en Toxicología. En tanto, un policía federal declaró sobre el desempeño de los sargentos Sergio García y José María Gómez que reportaban en Concepción del Uruguay. Tanto los gendarmes como el policía federal reconocieron las voces de sus compañeros -ahora imputados- en escuchas de conversaciones telefónicas que mantuvieron con Mario González, sindicado como jefe de una banda organizada para el narcotráfico.

"En 2014 hicimos numerosos allanamientos que resultaron negativos en Concepción del Uruguay. Se nos reían en la cara", contó este miércoles el policía federal Juan Costa, y añadió que sus dos compañeros imputados en la causa manejaban "datos sensibles" de las investigaciones. La declaración de Costa incomodó a los policías federales que se hicieron notar con gestos, declaraciones en voz alta y consultaban permanentemente con su abogado defensor Juan Pablo Temón y los defensores de otros imputados. "Dejá de mentir, está mintiendo, ya nos vamos a cruzar", espetó uno de los policías federales imputados al testigo.

Costa contó que en una oportunidad, un informante les estaba pasando datos a la Policía Federal sobre el paradero de González -que en ese momento llevaba varios años prófugo en otra causa por narcotráfico, en la que fue condenado el año pasado-, pero después de brindar la información lo amenazaron de muerte a él y su familia, por lo cual cortó el flujo informativo. "Después de darnos los datos sobre González, el informante nos volvió a llamar para preguntarnos qué nos pasaba, que alguien de ahí adentro había filtrado su identidad y lo habían amenazado de muerte a él y su familia. Con el compañero con el que trabajábamos en ese momento tuvimos que ir a hablar con el informante porque tenía miedo. Fuimos a su casa. Le conseguimos para él y su familia otro lugar donde vivir", relató Costa.

Durante la declaración de costa se reprodujeron algunas escuchas de conversaciones entre González y el sargento Gómez de la Policía Federal. En uno de los audios, el policía le avisa a González que lo vieron llegar a su casa de Concordia, que esté atento porque podría ser un vecino o alguien cercano a él. El funcionario de la fuerza le contó además que en su domicilio estaban haciendo tareas de vigilancia y lo alerta sobre posibles allanamientos que se podían pedir. También lo alerta sobre un Renault 12 y un Gol Tren rojo, los dos autos que usaban en investigaciones de la Policía Federal. "Vos tenés que irte a la mierda", le recomendó Gómez a González en un tramo de la charla.

"Ellos sabían que González estaba prófugo y que lo estábamos buscando", determinó el testigo sobre sus compañeros.

Los gendarmes reconocieron la voz de Acosta en las escuchas

Tres gendarmes del escuadrón 4 de Concordia, reconocieron frente a los jueces la voz de Carlos Francisco Acosta en las conversaciones telefónicas con Mario González. Gabriel Callejas era jefe del Escuadrón cuando detuvieron a Acosta y aseguró no saber, en ese momento, que González estaba prófugo de la justicia. Además se refirió a una reunión para organizar un operativo en desarmaderos de Chajarí, un movimiento de la fuerza que fue adelantado a González por parte de Acosta, según una conversación telefónica que fue grabada.

En el mismo sentido declaró Soledad Liendro y el gendarme Insaurralde. Éste último también dijo no recordar que hayan estado buscando al entonces prófugo Mario Gordo González.

De Núñez no sospecharon

El ex jefe de Toxicología de la Policía provincial, Antonio Alsina, descartó que Mario Núñez haya manejado un Aveo blanco porque dijo que en Toxicología había dos, uno manejado por el subjefe José Lauman y otro manejado por él. "Nunca facilité a Núñez el Aveo blanco", asentó. Alsina dijo que "nunca" sospechó de Núñez. Alsina dijo además que siempre se ajustó a las órdenes; agregó que es "común" que los policías tengan "informantes" identificados o no. "Sabía que él tenía informantes. Yo nunca le pedí que me revelara de quiénes se trataba, cada uno preserva la fuente", señaló.

Sobre la relación de Núñez con Lauman, Alsina aseveró: "En algún momento, Lauman me dijo que Núñez no le pasaba las novedades. Yo le contesté que proceda según el reglamento". Luego añadió que entre ambos había "respeto" aunque mencionó que "en una oportunidad Lauman me dijo que no quería Núñez. Yo le dije que lo arreglaran entre ellos".

Alsina refrendó la versión que Núñez dio cuando amplió su indagatoria y contó que le habían robado una notebook que hoy serviría como prueba en este juicio. "Recuerdo que fue a la vuelta de unas vacaciones", indicó. También aseguró que no vio "crecimiento económico" en el agente retirado de Toxicología.

En el mismo sentido testimonió Alcides Arce. "Creo que después de todo el procedimiento por el que se detuvo a Núñez, mucha gente hizo leña del árbol caído", graficó Arce sobre su compañero. "Nunca sospeché de la actividad de Núñez", asentó.

Durante la declaración de estos dos testigos no se reprodujeron escuchas telefónicas. Hasta ahora, la única que se amplificó fue una conversación donde Mario González lo llama al teléfono corporativo que tenía Núñez y le pasa información sobre un punto nuevo de venta de droga en Concordia. En un momento determinado de la charla, el comisario de Toxicología le pregunta a González si "andás por tus pagos".

Juicio
Unos 15 imputados son juzgados en Paraná por asociación ilícita, 11 personas pertenecen a una banda que comercializaba cocaína en Concepción del Uruguay, Colón y Concordia, liderada por Mario González y Javier Caire. Cuatro de los procesados son agentes de las fuerzas de seguridad. Según la investigación preliminar, los funcionarios públicos prestaban protección al grupo que traficaba estupefacientes y le avisaban de operativos. En la pesquisa, además se indicó que a cambio, los policías federales, el provincial y el gendarme habrían recibido información para perseguir a otras bandas narcos y, de ese modo, despejar el mercado ilegal para que creciera el grupo protegido. La investigación también sostiene que los agentes públicos habrían recibido contraprestaciones de dinero por la información brindada.

El debate se desarrolla en el Tribunal Oral Federal de Paraná, a donde asistieron los 15 imputados la semana pasada. Pero desde esta semana en adelante, sólo asisten a las audiencias aquellos procesados que están cumpliendo prisión preventiva: Mario González -ya tiene una condena por narcotráfico de este mismo tribunal-; Javier Caire -sindicado como organizador del tráfico junto a González-; Alberto Mario Núñez -agente de Toxicología-; Sergio García y José María Gómez -sargentos de la Policía Federal-; y Carlos Francisco Acosta -sargento Ayudante de Investigaciones de Gendarmería Concordia-.

El resto de los imputados son Mirta Noemí Sayavedra -a quien se le asignó el presunto rol de venta al menudeo en Concepción del Uruguay-; Elsa Cristina Caram -pareja de González, a quien se le asignó el supuesto rol de administradora del comercio en Concordia-; Rosana Isabel Tenis -hermana de González, a quien se le asignó el presunto rol de venta al menudeo en Concordia- ; María Isabel González -madre de González, a quien se le asignó el presunto rol de venta al menudeo en Concordia-; Nicolás Alberto Stur -primo de Javier Caire y socio comercial, a quien se le asignó el supuesto rol de transporte y venta de droga -; Santiago Javier Acosta -a quien se le asignó el supuesto rol de transporte en Concordia-; Néstor Javier Neurvit -a quien se le asignó el presunto rol de transporte de droga en Concepción del Uruguay-; Carlos Alberto Segovia -yerno de González, a quien se le asignó el supuesto rol de transporte en Concordia y colaboración en otras actividades-; y Orlando Daniel Caire ?padre de Javier Caire, a quien se le asignó el supuesto rol de almacenamiento de droga en Concepción del Uruguay-. Todo este grupo no tiene la obligación de asistir a las audiencias.

El juicio comenzó la semana pasada y se desarrolla todos los martes y miércoles. El cronograma prevé audiencias hasta fines de mayo, porque hay más de 50 testigos citados a declarar. El Ministerio Público Fiscal está a cargo de José Ignacio Candioti y Leandro Ardoy. Por otro lado, la defensa oficial que ejerce Mario Franchi representa a los imputados Santiago Acosta; a Orlado Caire; al gendarme Carlos Francisco Acosta; a Nicolás Stur y Néstor Javier Neurvit. El abogado Juan Pablo Temón defiende a los policías federales Sergio Javier García y José María Gómez. El abogado José Pedro Peluffo defiende a la imputada Mirta Noemí Sayavedra. El abogado Rafael Briceño representa al ex integrante de Tóxicos Mario Núñez. Y los abogados Juan José Bukténica y Francisco Azcué defienden a Mario Roberto González -como ya lo hicieron en la causa anterior por narcotráfico-, a Javier Alejandro Caire, a Elsa Cristina Caram, a Rosana Tenis, a María Isabel González y a Carlos Segovia.
Fuente: Análisis Digital
El comentario no será publicado ya que no encuadra dentro de las normas de participación de publicación preestablecidas.

NOTICIAS DESTACADAS