La medida que fue solicitada por la fiscal a cargo de la causa, Ana María Caro, es un intento por avanzar en la identificación del cadáver que fue encontrado el pasado martes a la madrugada a la vera de la ruta 11.
La reconstrucción facial, según publicó el diario La Capital de Mar del Plata, es un técnica digital de última generación y fue muy poco utilizada en el país.
Una vez que se consiga la imagen de la cara, la misma será divulgada en los medios y en las redes sociales para intentar encontrar a alguna persona que pueda reconocerla. Este jueves, se conoció que la semana próxima se realizará una nueva operación de autopsia al cuerpo, la que intentará determinar el sexo.
"Se va a peritar el cuerpo otra vez la semana que viene en San Martín para definir el sexo. Y ahora la fiscal espera los resultados de los peritajes de la ropa y de los pelos que se encontraron ayer", confirmó una fuente judicial a NA.
Además, la fuente contó que para determinar el sexo, los peritos entre otros análisis, medirán los huesos del cadáver para intentar saber si el cuerpo pertenece a un varón o a una nena.
En tanto, el resultado de los peritajes de los cabellos y de la ropa que fueron encontrados el último miércoles, cerca del lugar del hallazgo, será muy importante para incorporar a la causa y poder determinar a quien pertenece el cuerpo. Este jueves también se supo que de la primera operación de autopsia que ya se le realizó al cadáver, surge que el cuerpo habría estado preservado por un tiempo prolongado en frío antes de ser descartado.
Por el momento, la fiscal Ana María Caro baraja varias hipótesis, entre las que se encuentra la realización de algún rito sagrado, que el cuerpo fue utilizado como mula para el tráfico de drogas, o que el cadáver pudo haber sido extraído de algún cementerio o morgue para luego profanarlo.
El macabro hallazgo ocurrió el último lunes por la noche a la vera de la ruta provincial 11 que une Miramar con la vecina localidad de Mar del Sud y fue un hombre de 45 años quien encontró el cuerpo a unos 20 metros del arroyo "La Totora".
El cadáver estaba completamente desnudo, en estado de descomposición, y le faltaban ambos pies y manos, la dentadura y también los órganos.
