De acuerdo a los datos que pudo conocer Diario Río Uruguay, todo se generó cuando una joven que conducía un Fiat 147 arrancó el motor de su auto tras cargar combustible, marcho unos escasos tres metros del surtidor y se bajó gritando que el auto se prendía fuego.
De inmediato los playeros del lugar tomaron los matafuegos, pero el aparente cortocircuito y el combustible se conjugaron para que las llamas tomaran toda la parte delantera del vehículo. Uno de los trabajadores del lugar contó a este medio que "el auto se nos prendía fuego arriba de un tanque de 25.000 litros que lo habíamos llenado a la tarde", por lo que decidieron empujar el auto para sacarlo de la playa de la estación y que siguiera por la pendiente hacia calle Montevideo, hasta la vereda de la escuela Manuel Belgrano, que estaba con su alumnado del turno nocturno.
Con esa rápida decisión lograron sacar el auto que se incendiaba del peligro de provocar un desastre peor en la estación de servicio, si bien vale remarcar que solo pasó a quedar a pocos metros sobre la vereda de enfrente, hasta que llegaron los Bomberos Zapadores de la policía de Entre Río y terminaron de apagar el fuego.
Afortunadamente no hubo personas lesionadas y únicamente se registraron importantes daños materiales en toda la estructura y motor del automóvil siniestrado.
