Ernesto Fidel Barón, de 40 años, oficial de la comisaria sexta que llegó al lugar del robo, en calle Ramírez al 4.200, varios minutos después que el móvil 810 de la comisaría décima en el que iban los otros dos imputados, el sargento Roberto Daniel Ramírez, de 38 años y el agente Matías Alejandro Isseli, 28 años, bajo las órdenes de la sargento Eva De Los Santos, aseguró este viernes que "la sargento me dijo que estaba todo bien, que sólo era una ventana abierta".
Barón también dijo que su par de la Décima no le informó que sus subordinados habían entrado a la casa a verificar si dentro había un ladrón, tal como sostuvieron Ramírez e Iseli cuando declararon que unos chicos que estaban en la esquina de la casa se lo aseguraron. El lunes será la etapa de alegatos, donde la fiscal coordinadora Carolina Castagno, y la fiscal auxiliar, Paola Farinó, y los defensores Bartolomé Gaggero, por Barón, y Marcelo Franco y Víctor Rodríguez Montiel, por Ramírez e Iseli, expondrán sus argumentos para sostener lo que adelantaron en los alegatos de apertura.
En este sentido, Fiscalía adelantó que pedirá un año de prisión condicional más la inhabilitación para ejercer cargos públicos por el doble de tiempo de la condena; y las defensas la absolución lisa y llana.
Versiones. Barón se defendió de la declaración de De Los Santos, que cuando declaró dijo que le informó sobre todo lo que hizo en el lugar, sorprendiéndose de la actitud de su colega, diciendo que si le hubiese dicho que en el lugar se cometió un delito hubiera informado al fiscal y convocado a Criminalística para que realizara las pericias correspondientes. También añadió que verificó la situación en la vivienda y vio que solo había una ventana entreabierta.
El oficial negó que las luces de la vivienda hayan estado encendidas, tal como declaró este viernes la chica que realizó el llamado dando cuenta del robo en curso a la División 911.
El testimonio de la joven contradijo lo declarado por Ramírez e Iseli, que dijeron que las luces de la casa estaban apagadas cuando ingresaron a buscar al supuesto ladrón.
Barón recordó que su casa fue allanada tras la denuncia de la damnificada, el día después del robo; circunstancia en la que le pidieron un informe sobre su actuación, parte que entregó a su superior pero nunca fue encontrado en el marco de esta investigación para dilucidar su responsabilidad en el hecho. Incluso, cuando los superiores declararon manifestaron no conocer el parte.
Sincericidio. Este viernes declararon efectivos que tuvieron relación indirecta con los sucesos ocurridos el 19 de octubre de 2014 alrededor de las 23.40. El más explícito respecto de la precariedad en la que los efectivos realizan su trabajo fue el de un policía con 25 años de servicio, identificado por sus iniciales como MM. El efectivo dijo que ingresó a la fuerza con séptimo grado como única instrucción.
También defendió que los imputados hayan ingresado a la vivienda sin esperar a los oficiales. Así, contó algunas anécdotas que refirieron a un modo sui generis de los efectivos para resolver situaciones críticas, cuestionando que en la academia no reciben la instrucción para entrar a una casa en la que supuestamente hay ladrones o se está golpeando a una persona.
Así, dijo que se aprende sobre la marcha y en base a los errores de otros. También cuestionó que los uniformados no tengan elementos, como guantes de latex, para no alterar lo que mencionó como "testigos mudos", en referencia a huellas y pruebas que se recolectan luego en las escenas de un delito.
"Salimos a la calle crudos"
El policía dijo que "en la calle es un mundo totalmente diferente. Aprendemos a trabajar a la fuerza o con suboficiales más viejos". En este sentido dijo que "mientras nos están explicando cómo son las leyes, nos están raleando bajo el sol; entonces salimos a la calle crudos y aprendemos del error de los otros". (ElDiario)
