El hombre llamó al 911 y rápidamente se hicieron presentes efectivos de la Comisaría 5ª y del CPC, quienes constataron que en el lugar se encontraba el cuerpo sin vida de César Augusto Noguera, domiciliado a pocos metros de donde ocurrió el hecho.
El cadáver presentaba un profundo corte en el cuello y a su lado se hallaban restos de una botella de cerveza. El personal policial recibió testimonios que indicaron que Noguera junto con un vecino habían contratado los servicios de una conocida prostituta de la zona.
La mujer había estado primero en la casa del otro hombre (llamado Silvio) y luego se había juntado con Noguera. Fueron a comprar una cerveza a un kiosco cercano y pocos minutos después se habría generado una discusión a raíz de diferencias por el monto pactado por el servicio. En esos momentos, la mujer lo golpeó salvajemente con la botella en la cabeza y le cortó el cuello con un trozo de vidrio.
A las 4:10, en el cruce de Alexander Graham Bell y Facundo Quiroga, mientras ambos regresaban a la casa habitada por Silvio, la prostituta y César entablaron una acalorada reyerta, porque se dice que no se ponían de acuerdo en cuanto al dinero que el sujeto iba a tener que abonar para que la muchacha le practicara sexo oral.
Repentinamente, la joven se apoderó de una de las botellas de cerveza y le aplicó al menos tres violentos golpes en el cráneo al hombre, provocándole la muerte de manera instantánea. Después, la asesina tomó la billetera de la víctima y le sustrajo el dinero, que utilizó para contratar los servicios de un remisero.
El cadáver del hombre fue hallado a las 7:10 por los integrantes del Comando Patrulla de Moreno, quienes vieron que junto al fallecido se encontraba la botella quebrada y trozos de palo de escoba, mientras que a pocos metros había una bolsa que contenía otras dos botellas de cerveza (una de las cuales también estaba rota). La billetera fue incautada en el interior de una zanja, en las proximidades del escenario del crimen.
Diversas versiones sostienen que el cadáver de Noguera fue reconocido por un vecino del lugar, quien les dijo a los uniformados que era hermano de un hombre de la zona.
Basándose en los datos obtenidos en el lugar, pesquisas policiales de la comisaría de Paso del Rey (5ª de Moreno) apresaron a la prostituta, luego de un procedimiento realizado en Hipólito Yrigoyen al 2000, en esa zona del oeste del conurbano provincial.
La asesina fue identificada de manera rápida
Los investigadores que intervinieron en el caso pudieron determinar que la asesina era Gisela Digiácomo, de 28 años, identificando rápidamente los lugares que frecuentaba.
En menos de dos horas fue apresada y remitida a los calabozos de la seccional quedando imputada por el delito de homicidio.
Instruye la causa la UFI N°8 del Departamento Judicial de Moreno y General Rodríguez, a cargo de la doctora Gabriela Urrutia.
