Al joven se le atribuyó que el 13 de julio, aproximadamente a las 20, en compañía de otro joven que no fue identificado, rompió con una piedra la vidriera de un local comercial ubicado en Avenida Ramírez se apoderó de una remera mangas cortas escote en V, una campera símil cuero talle CC, una cadena superpuesta de eslabones y arandelas plateadas, tres perchas, todos elementos que fueron secuestrados en poder del joven que intentó huir a pie del lugar pero fue aprehendido en la esquina de López y Planes y Brasil, por el rápido accionar de personal del 911 que se abocó a la búsqueda de los autores del hecho. También se precisó que el cómplice del joven, que logró huir de la persecución policial lo hizo llevándose una campera de cuero ecológico y una campera inflable de tela de avión.
En la audiencia se supo que el joven no tiene antecedentes condenatorios y que ofreció a la víctima, tal como lo requiere el instituto de Suspensión del juicio a prueba, una reparación económica consistente en doscientos pesos que se comprometió a pagar en cuatro cuotas de cincuenta pesos, en virtud de su evidente insolvencia. Este ofrecimiento aún no estaba en conocimiento de la víctima, que tendrá que dar su consentimiento o decidir acudir a la vía civil para obtener una reparación del daño que sufrió, puesto que fue acordado ayer.
Ruhl le explicó al imputado en qué consistía la Probation, que por medio de este instituto, por el momento, no se realizaría el juicio, añadiendo que si incumplía las normas de conducta se le revocaría el beneficio y se realizaría el correspondiente juicio, incluso le indicó que si la revocatoria se producía porque había cometido un nuevo delito, perdería la posibilidad de acceder a una condena de ejecución condicional. El magistrado culminó aclarándole que si cumplía con los requisitos, la causa se archivará.
