Policiales El caso sucedió a fines de 2014

Familia de un hombre fallecido denunció por mala praxis a sanatorio paranaense

Una familia denunció por mala praxis a un sanatorio de calle España de Paraná, luego de que un hombre falleciera a los dos días de haber sido intervenido quirúrgicamente, supo Códigos.
Oscar Blázquez falleció en diciembre del año pasado y su familia denunció penalmente al sanatorio Río, por "mala praxis, abandono de persona, error de diagnóstico y adulteración de historia clínica", según relataron a Códigos, Irma Inés Rodríguez, esposa de Blázquez; y sus hijos, Adriana y Hernán.

La hija del comerciante paranaense comentó el calvario que sufrió Oscar Blázquez, antes de su muerte. Al hombre lo operaron de vesícula, aunque, según la autopsia realizada por el equipo forense de Concordia (por disposición de Fiscalía), falleció por "úlcera de estómago que, por no seguir los protocolos médicos, no fue diagnosticada", dijo el hijo del hombre.

"Entró con un dolor, lo diagnosticaron mal, lo operaron de vesícula, que nada tenía que ver con su dolencia y falleció", dijo Adriana.

El hombre comenzó "con un dolor en la boca del estómago". Desde el centro de salud Corrales le recomendaron que asistiera al Sanatorio Río, al que pertenecía por PAMI.

Para la familia "hubo dilaciones" en la atención "por pertenecer a la obra social de los jubilados". "Por ejemplo, quince minutos antes de la realización de la radiografía nos comunicaron que se había roto el aparato de Rayos X. Supimos después que no estaba roto, sino que no hay placas para los afiliados de Pami", mencionó Adriana Blázquez.

De acuerdo a lo indicado, siempre se lo atendió a Blázquez por "una piedra en la vesícula", se le dijo que "no era para operar, porque la piedra estaba quieta", aunque, como continuaba con los dolores, y tras "repetidas visitas al sanatorio", "el doctor Degani resolvió hacerle una laparoscópica", manifestaron.

"Lo operaron pero no le hicieron los estudios previos", contaron además los familiares del comerciante fallecido.

"Nos mandaron a llamar, asomó la cabeza por la puerta el doctor Degani, y nos dijo que la operación había salido re bien. `Encontramos una infección muy avanzada, así que le van a ver unos puntitos en la panza porque lo abrimos y limpiamos la infección que había. Cuando despierte lo llevamos a la habitación`, nos dijo el médico", rememoró Hernán, sobre los momentos posteriores a la cirugía. Asimismo acotó que "pese a no haber drenado nada" de la intervención, le dieron el alta.

Ya en la casa, y como el hombre seguía con los dolores, "nos decía que le quemaba el estómago", aseguró Hernán, lo volvieron a llevar al sanatorio y les indicaron que lo iban a intervenir nuevamente. Lo derivaron a Terapia intensiva y de allí, no lo vieron más con vida.

"Me lo trajeron muerto, en una camilla, cubierto con una sábana blanca; lo dejaron en el pasillo", afirmó el hijo del hombre, al recordar el lamentable hecho.

La autopsia firmada por los médicos forenses Manuel Maller y Gustavo Lallana, indica que la muerte se debió a "una perforación de úlcera gástrica, con peritonitis química, asepsis y falla multiorgánica".

"No murió por la operación de vesícula, ni por infección a raíz de esto. Murió porque tenía una úlcera en el estómago que, por no seguir los protocolos médicos, no se la encontraron", resumió Hernán Blázquez.

Dijo también que "ni el doctor Degani, ni la dirección del Sanatorio Río, nos convocó para darnos una explicación". La causa es investigada por el fiscal Burgos. Elonce.com.
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