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En el acuerdo también se incorporó a Sol Denise Mernies, de 21 años, que fue representada por Juan Pablo Temón. Los hechos que se dirimirán en el acuerdo, ocurrieron en Colonia Avellaneda entre 2012 y 2013.
El acuerdo al que arribaron las partes comprendió la pena de ocho años de prisión efectiva para Martínez, que actualmente está alojado en la Unidad Penal Nº 2 de Gualeguaychú, y dos años de prisión condicional para Mernies, que deberá informarse en la Ofician de Medios Alternativos (OMA) de las normas de conducta que deberá observar mientras dure la condena.
La joven fue imputada del delito de Tenencia simple de arma de uso civil, en relación a una de las tentativas de homicidio que se le atribuyeron a Martínez. Según la acusación, la joven le habría alcanzado el arma con la que Martínez le efectuó un disparo desde una distancia de diez metros a Juan Alberto Bartolomeo, que estuvo en la sala de audiencias como querellante del joven junto a su representante legal Andrés Stigliano.
El hecho ocurrió el 3 de mayo de 2015 en una cancha de fútbol cinco de Colonia Avellaneda, cuando Martínez desde una moto que presumiblemente era conducida por un joven cuyo nombre seria Samuel, le disparó a la víctima impactándole en la nuca, afectándole la bala la columna vertebral.
En el acuerdo, Fiscalía entendió que no se pudo acreditar, porque no fue hallada, que el arma que le entregó Mernies a una tercera persona, que fue quien se la entregó a Martínez, sea la que éste utilizó para agredir a Bartolomeo. En este sentido, se recalificó la imputación a Tenencia simple porque sí quedó comprobado que la joven tenía un arma calibre 22 en la mochila que portaba aquella noche.
Además de la violenta agresión a Bartolomeo, a Martínez se le atribuyó otro episodio similar en el que una persona resultó lesionada con dos disparos de arma de fuego. También se le imputaron varias amenazas a mano armada a testigos del ataque a Bartolomeo, a quienes amenazó diciéndoles que les "iba a pegar un tiro igual que al porteño", por la víctima; y resistir el intento de detención en relación a las amenazas acometidas contra una pareja a la que intimó a que dejen la vivienda que ocupaban porque los consideró "antichorros". Al término de la audiencia, Martínez pidió cumplir la condena en la Unidad Penal de la ciudad de Victoria para estar más cerca de su familia, pedido que el Tribunal resolverá cuando le informe si decidió homologar el acuerdo que se puso a su consideración.
Martínez y Mernies no tienen antecedentes penales computables. En la audiencia fueron informados pormenorizadamente de la modalidad de juicio abreviado, dando los dos su conformidad para su aplicación. Así, reconocieron la existencia de los hechos que se les leyeron en la sala, su calificación legal y admitieron voluntariamente su participación en los mismos.
A Martínez se le imputaron los delitos de Tentativa de homicidio, primer hecho, y Amenazas agravadas por el uso de arma, segundo y tercer hecho) todos ellos concursados realmente; además de Resistencia a la autoridad, Amenazas calificadas y Tenencia de arma de fuego de uso civil; Amenazas calificadas, Robo en grado de tentativa y Abuso de arma de fuego, todos en concurso real. En tanto que a Mernies sólo se le imputó el delito de Tenencia simple de arma de uso civil.
