Policiales En escuela de Concordia

En asamblea, decidieron suspender las clases por la inseguridad

"Entre los bienes robados a lo largo del tiempo figuran ollas, 8 equipos completos de informática, mercaderías del kiosco, ventanas y mobiliario que vemos en las casas del barrio", contó un profesor. Ahora tomaron como blanco a los alumnos.
El pasado 5 de junio por enésima vez, rompieron y robaron en el kiosco de la escuela López Jordán de Concordia. Continuaron trabajando hasta el jueves pasado y decidieron en asamblea suspender las clases en todos los niveles.

"La situación es insostenible tenemos una matrícula superior a los 600 alumnos, en diferentes turnos y nos roban adentro y lo peor es que los chicos son asaltados en el ingreso a la mañana y también cuando salen en el turno nocturno", relató un docente.

La situación es tan grave que, desde hace algunos años, los docentes decidieron cambiar el ingreso al establecimiento, entrando por la calle lateral, República del Paraguay, dejando de lado el frente que da a calle Isthilart. "La escuela se parece más a una cárcel que a un entidad educativa, así no podemos trabajar", expresan en el reclamo.

"En el inventario de los bienes robados a lo largo del tiempo figuran: ollas, 8 equipos completos de informática, mercaderías del kiosco, ventanas y mobiliario escolar que los vemos en las casas del barrio", cuenta un profesor entre otros bienes.

"Ahora han tomado como blanco a los alumnos y saben que cuando esperan o bajan de un colectivo y cuando están entrando, en una mochila siempre van a encontrar algún celular o una netbook del programa Conectar. Entonces debemos pedirles a los chicos que no traigan nada solo una carpeta para evitar ser asaltados", precisó.

En la búsqueda de soluciones y como no existe el cargo de sereno o cuidador en educación, solicitaron la presencia de un policía, "si bien el jefe dio respuestas aclaró que si necesitaba al efectivo para cubrir alguna necesidad por la falta de efectivos lo relevaría de la escuela y es así que retiró al policía que cuidaba el edificio y nunca más mandaron a nadie", añadió.

Ayer fueron recibidos por la presidenta del Consejo General de Educación, Claudia Vallori, en la reunión un grupo de docentes y padres le entregó un petitorio y la funcionaria lo llevó para estudiarlo y dar respuestas, mientras tanto no hay clases y cuatro o cinco delincuentes de calle Isthilart parece que ganaron la pelea contra los que quieren educarse o progresar, publica diario El Sol.

En tanto, en representación de los padres de la Escuela López Jordán, Paola Farías, dijo que "necesitamos seguridad en forma permanente, tanto dentro como fuera de la escuela, porque nuestros chicos son asaltados, así que pedimos una garita permanente fuera de la escuela - porque nos dan un policía por unos días y, después, lo retirar- y un sereno dentro de la escuela, en forma permanente".

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