Policiales Afirma que hay “elementos de sobra” para procesar al sacerdote

Caso Ilarraz: “Las pruebas de mayor peso son las declaraciones de las víctimas”, dice el fiscal

El cura debió ampliar su indagatoria el viernes 15, pero ese día se enfermó la jueza y el trámite quedó aplazado. Ahora la querella pidió formalmente que se fije fecha para que el cura se haga presente en Tribunales.
La causa por los abusos en el Seminario Arquidiocesano Nuestra Señora del Cenáculo en la que se acusa al cura Justo José Ilarraz, quien fue director espiritual y prefecto de disciplina entre 1985 y 1992, ya tiene su etapa de pruebas completada y lo que cabe por delante es el procesamiento del sacerdote y la elevación del caso para juicio oral y público, después de casi tres años de instrucción.
Esa es la postura del fiscal del caso, Juan Francisco Ramírez Montrull, que ya le pidió oficialmente a la jueza a cargo, Susana María Paola Firpo, titular del Juzgado de Transición Nº 2, el procesamiento del sacerdote por el delito de corrupción agravada de menores. A criterio del fiscal, las pruebas que han logrado reunirse en el expediente permiten reconstruir los hechos en forma coincidente a como lo relataron las víctimas, siete en total, lo cual justifica el dictado del procesamiento y encaminar la definición de la situación procesal de Ilarraz.
Ramírez Montrull no sólo considera con especial interés el testimonio de las víctimas, que juzga una prueba clave para procesar a Ilarraz, sino también las declaraciones del cura Silvio Fariña, que fue quien lo investigó después de las primeras denuncias conocidas en 1995, y el ahora cardenal Estanislao Karlic, quien le impuso la sanción del destierro, en 1996. En su presentación por escrito en la Justicia –Karlic no testimonió en forma personal—admitió que Ilarraz reconoció los hechos y le mostró su arrepentimiento, durante un encuentro en Roma. “Estamos en esta etapa de la instrucción, y tenemos que hablar de procesamiento. Y el procesamiento no requiere de certezas, como sí lo requiere la condena; solamente requiere una probabilidad de la existencia del hecho. Y eso está totalmente probado”, dice Ramírez Montrull en una entrevista con El Diario.

—¿En qué instancia está hoy la causa Ilarraz?
—Ahora, lo próximo que esperamos es la resolución que tiene que adoptar la jueza respecto del recurso de reposición planteado por la defensa, y también está pendiente la fijación de la audiencia de ampliación de indagatoria (estaba prevista para el viernes 15, pero se suspendió debido a un estado gripal de la jueza, NdelR). Posterior a eso, la resolución de la situación procesal de Ilarraz. El recurso de reposición es una figura que planteó la defensa de Ilarraz a partir del pedido de la querella para que se amplíe la pericia psicológica, que dé una explicación respecto de cómo se dio la relación entre las víctimas e Ilarraz que permitió ese intercambio de cartas que hubo entre ellos. La defensa dice que esa ampliación de la pericia tiene que quedar a cargo de otros peritos, y nosotros consideramos que no es necesario.

—¿Para la Fiscalía debería cerrarse la etapa de instrucción?
—Entendemos que la prueba que hay es suficiente. Si bien restan pruebas por cumplir, algunas incluso a pedido nuestro, entendemos que el marco probatorio es tal que amerita que se clausure la etapa de instrucción. Si ya pedimos el procesamiento es porque entendemos que las pruebas que hay son suficientes. Y es por lo que estamos bregando: que se clausure la instrucción, porque la defensa ha tenido todo este tiempo como para producir las pruebas que consideraba necesarias. Y consideramos que en ese caso no se estaría afectando ningún derecho, el debido proceso, ni la defensa en juicio. Todo está totalmente constatado, y plasmado en la investigación. Toda otra prueba que se requiera deberá ser evaluada con prudencia, y el juez evaluar si es pertinente producirla ahora o no.

—¿Los fundamentos del fallo del Superior Tribunal de Justicia, que rechazó el planteo de prescripción, avalan esa línea argumental?
—Claro, impulsa lo que venimos pidiendo: avanzar con esta investigación. Resuelta la prescripción, se da un nuevo impulso al proceso, y más todavía cuando quien lo resuelve es el máximo organismo de justicia de la provincia.

—En cuatro meses se cumplen tres años de la apertura de la causa Ilarraz, y da la sensación que las víctimas tienen que seguir recurrentemente probando que fueron abusados.
—No sólo que tienen que seguir probando que los hechos existieron, sino que lo tienen que probar concurriendo nuevamente a Tribunales, y eso es en lo que no estamos de acuerdo. Si bien ahora son mayores, los hechos los padecieron cuando eran menores, son víctimas de un delito contra la integridad sexual, lo han demostrado cada vez que han venido. Han venido a la fiscalía, y luego ratificaron sus dichos ante la jueza, algo que es discutible si lo tenían que ratificar o no. Sin perjuicio de eso, que lo consentimos, han tenido que venir y revivir cada una de las circunstancias, con todo el sufrimiento que eso les provoca. Ese hecho ha quedado claro, y demostrado, y por eso se ha solicitado que no se cite más a las víctimas, porque después también van a tener que venir al juicio. Debieron hacerse presente en el despacho de la jueza para reconocer como propias cartas escritas a Ilarraz, algo que se podría haber hecho durante la etapa del juicio porque, además, la defensa tuvo tres años para presentar esa prueba.

—¿Cuál es la prueba de mayor peso para acreditar que los hechos existieron?
—Sin duda, las pruebas de mayor peso son las declaraciones de las víctimas, con los detalles que dieron, hechos que además fueron confirmados por testigos. Pero además quedó probado que son personas creíbles, veraces, que no fabulan, corroborado por testigos y por las pericias.

—¿Qué importancia reviste el testimonio de Karlic?
—El peso que tiene se lo da el rol que cumplió en ese momento y por ser quien tuvo conocimiento del hecho en aquel entonces, y porque también mandó a investigar a Ilarraz. No es una persona ajena que tuvo conocimiento de los hechos pasados los años, sino que tiene conocimiento de los hechos desde aquel entonces, y fue él el que declaró que, estando cara a cara con Ilarraz, Ilarraz le dijo que había sido el responsable, que había cometido los hechos y que manifestaba su más sincero arrepentimiento.

—En el fallo del Superior Tribunal, el voto del vocal Carlos Chiara Díaz apunta a impulsar la investigación, de modo que puedan presentarse nuevas víctimas.
—Es así. Por eso es que nosotros siempre instamos a romper con esa barrera de la prescripción, Se tiene que dar una respuesta a las víctimas, y la mejor forma de dársela es continuar con la investigación. Esta cuestión tiene que resolverse en juicio, en un juicio oral y público, que es a lo que apuntamos.

—¿Habrá procesamiento?
—El Ministerio Público Fiscal valoró la prueba, y entendió que hay elementos de sobra para que esto se produzca. El marco probatorio que hay es abundante no sólo para un procesamiento sino para una condena, sin dudas. Pero estamos en esta etapa de instrucción, y tenemos que hablar de procesamiento primero. Y el procesamiento no requiere certezas, como sí la condena. Sólo requiere una probabilidad de la existencia del hecho. Y esto está totalmente probado. Entendemos que todos los elementos reunidos son suficientes par que se cierre la instrucción, y se resuelva todo en juicio oral y público.

Piden fecha para la indagatoria
La abogada Rosario Romero, una de las querellantes en la causa por los abusos en el Seminario, solicitó formalmente a la jueza Susana María Paola Firpo que fije fecha para la ampliación de la indagatoria del cura Justo José Ilarraz.
Romero dijo que, tras la suspensión de la ampliación de indagatoria, prevista para el viernes 15 del actual, la jueza no volvió a establecer fecha para ese trámite.
Ilarraz había sido citado a declaración indagatoria el 21 de abril último, y ese día fue la segunda vez que se hacía presente en Tribunales después de que en 2012 se abrió una causa penal en su contra por los abusos ocurridos en el Seminario Arquidiocesano.
La primera vez que estuvo en Tribunales fue el 6 de abril, cuando concurrió a una citación para efectuarse una pericia psiquiátrica. Pero ese día se hizo presente, ingresó a Tribunales por una puerta lateral para no ser visto, y pidió que el trámite fuera aplazado para después de la indagatoria.
Pero cuando ocurrió ese hecho, la indagatoria, prefirió abstenerse de declarar: proclamó su inocencia, y dijo que las denuncias en su contra eran falsas.
Una semana después, la Sala Penal del Superior Tribunal de Justicia (STJ) resolvió un planteo de prescripción de la defensa, y rechazó el pedido, y ordenó así seguir adelante con la investigación judicial sobre Ilarraz.
Conocida esa decisión, la defensa de Ilarraz, representada por los abogados Juan Ángel Fornerón y Jorge Muñoz, decidió pedir la ampliación de la indagatoria.
Esa ampliación, que debía cumplirse el viernes 15 del actual fue aplazada debido a que la jueza se enfermó. Ahora, la querella quiere que se fije nueva fecha y no se aplace más el trámite.
El comentario no será publicado ya que no encuadra dentro de las normas de participación de publicación preestablecidas.

NOTICIAS DESTACADAS