A punta de pistola dos individuos entraron con el rostro descubierto, haciéndose pasar por clientes y encañonaron a la empleada, exigiéndole la recaudación, con total normalidad y tranquilidad se llevaron una suma de dinero superior a los 1000 pesos y luego huyeron.
Según fuentes policiales serían los mismos delincuentes que en horas de la tarde habían protagonizado diversos arrebatos en diferentes zonas.
Se trasladaban una motocicleta 110 cm3 y se cree que uno de ellos, el que apuntó a la empleada, sería menor de edad. (El Sol)