María Inés Tomaselli, de 56 años y oriunda de la localidad bonaerense de Bernal, reconoció en un juicio abreviado que la cocaína era para comercializar y consintió la pena de cárcel que le ofreció el fiscal, además del pago de una multa de 3.000 pesos.
La mujer fue detenida el 30 de agosto de 2013. Alrededor de las dos de la tarde, efectivos policiales advirtieron su presencia en la casa de María Laura Spoturno, la esposa del condenado narcotraficante Gonzalo Caudana, en calle Gobernador Febre de Paraná. Los policías vieron a Tomaselli recibir un paquete de color marrón y una bolsa de nylon transparente, y luego subir a un remís. Cuando la interceptaron, después que el automóvil de alquiler hubiera recorrido varias cuadras, constataron que el envoltorio contenía un ladrillo de una sustancia blanca, 36 tizas y tres trozos pequeños. El pesaje arrojó un total de 1,381 kilos de clorhidrato de cocaína.
Más allá del reconocimiento de responsabilidad por parte de Tomaselli, el tribunal integrado por Roberto López Arango, Lilia Carnero y Noemí Berros consideró que de acuerdo a la manera en que la sustancia ilícita se encontraba preparada (ladrillo, tizas y envoltorios), dan cuenta que estaban preparadas para ser colocadas inmediatamente en la red de comercialización, encontrándose también comprobado el dolo de tráfico.
El juicio estaba fijado para marzo del año próximo, pero la sentencia se adelantó por la voluntad de Tomaselli de llegar a un acuerdo mediante la admisión de su responsabilidad en un procedimiento abreviado.
Sin embargo, la investigación continúa abierta. Es que a partir de este hecho también resultó imputada la esposa de Caudana, María Laura Spoturno, que sería la persona que le entregó a Tomaselli la droga que luego encontraron los policías.
En el Juzgado Federal de Paraná, a cargo de Leandro Ríos, se encuentra en trámite una investigación respecto de una probable ramificación de la causa y la intervención de otros sujetos en la venta de estupefacientes, según se indicó a El Diario. Respecto de Spoturno, la causa aún no ha sido elevada a juicio, pero además se sospecha que en la organización delictiva podría haber otras personas.
En su momento, al denegarle la excarcelación a Tomaselli, la jueza Berros había manifestado que es un hecho público y notorio que esta clase de actividades ilícitas han proliferado en esta ciudad (Paraná), con gran incidencia en la sociedad, lo que determina precisamente un riesgo procesal concreto.
La magistrada destacó que el flagelo de la droga y sus terribles consecuencias es un problema que tiene grandes dimensiones en esta ciudad de Paraná, que al ser una comunidad todavía provinciana, trasciende intensamente hacia su población, que reclama medidas más drásticas, sentenció.
