Policiales Gualeguaychú

Confirmaron la sentencia para tres ex policías por vejar a dos jóvenes

Los efectivos habrían aplicado varios golpes a dos acusados de cometer un hecho delictivo. Uno de ellos manifestó haber sido víctima de un “culatazo” de un arma larga, mientras que el otro adujo un golpe de puño en su rostro.
El Día
Foto: El Día
Los efectivos policiales Máximo Martínez, Luis Hermelo y Pablo Gaytán fueron condenados a prisión en suspenso por vejaciones y abuso de autoridad contra dos jóvenes en Gualeguaychú. Sus abogados recurrieron en casación, pero esta semana la Cámara de Casación lo rechazó.
El juicio contra los tres funcionarios policiales se realizó en los primeros días de marzo. En esa oportunidad, se condenó por los delitos de vejaciones en acto de servicio, en concurso ideal con lesiones leves calificadas por abuso de su función, a Pablo Facundo Gaytán, a un año y tres meses de prisión de cumplimiento en suspenso, más la inhabilitación por el doble de tiempo de la condena para ejercer funciones policiales. También se le impusieron reglas de conducta a cumplir por el término de dos años, como fijar residencia y evitar cualquier acto perturbatorio en relación a las víctimas y testigos presentes en la causa.
A Luis Mariano Hermelo también se lo consideró coautor responsable de los delitos y se le dictó la pena de un año y seis meses de prisión, cuyo cumplimiento también se dejó en suspenso, más la inhabilitación por el doble de tiempo de la condena para ejercer funciones policiales. Además, por el término de dos años y seis meses, deberá fijar residencia y evitar cualquier acto perturbatorio en relación a las víctimas y testigos presentes en la causa.
Por último, Santos Máximo Martínez considerado coautor de los delitos, fue condenado a dos años de prisión de cumplimiento en suspenso, además de la inhabilitación por el doble de tiempo de la condena para ejercer funciones policiales. Se le impusieron tres años para las reglas de conducta.
Tras este fallo, los abogados defensores Raúl Jurado, Víctor Rebossio y Pablo Ledesma recurrieron a la siguiente instancia de apelación, pero la Cámara de Casación Penal, presidida por Rubén Chaia, rechazó los recursos interpuestos y en consecuencia se confirmó la sentencia dictada por la Cámara Penal de Gualeguaychú, que favoreció a lo denunciado por las víctimas, representadas por Amelia Angerosa.

El caso
El 22 de marzo de 2009, los tres uniformados a bordo de una vieja Ford F100 que funcionaba como patrullero, acudieron a un llamado por un hecho delictivo en el barrio Guevara, en calle Irazusta al sur. Los damnificados de ese hecho señalaron que los autores habían sido dos jóvenes que escaparon en una moto, aportando descripciones precisas.
Pocos minutos después, y según el testimonio de los policías, los dos jóvenes los sobrepasaron a gran velocidad, gritándoles todo tipo de improperios. Hicieron caso omiso a la voz de alto y se inició una persecución desde Irazusta y el Acceso Sur hasta Boulevard Martínez y Gervasio Méndez.
Durante ese trayecto – según lo señalaron los uniformados en la instrucción y el juicio – el viejo móvil policial no alcanzó a la moto, que escapaba a gran velocidad. Fue recién en el barrio 348, cuando los jóvenes entraban la moto a un garage, que los policías lograron aprehenderlos.
Durante ese procedimiento – según consta en la denuncia de los jóvenes – los efectivos habrían abusado de su autoridad, aplicándoles varios golpes para lograr reducirlos. Uno de ellos manifestó haber sido víctima de un “culatazo” de un arma larga, mientras que el otro adujo un golpe de puño en su rostro.
Los policías manifestaron en su declaración que debieron actuar bajo una lluvia de piedras por parte de vecinos que pedían por la liberación de los aprehendidos, pero aseguraron que nunca se usó la fuerza desmedida, solo para reducir a los jóvenes. (El Día)
El comentario no será publicado ya que no encuadra dentro de las normas de participación de publicación preestablecidas.

NOTICIAS DESTACADAS