En las últimas palabras antes de que se diera por finalizado el debate, Pallavidini sostuvo su inocencia y se lamentaba de que el único error que cometió el mediodía del 13 de junio de 2012 fue no haberse quedado en el kiosco cuando la mujer que lo atendió alertó que la estaban robando. El efectivo jura y perjura que la mujer se asustó cuando vio el arma en mi mochila cuando saqué la billetera para pagar la tarjeta de telefonía que había pedido instantes antes. Esto me arruina la vida entera, sostuvo el lunes 28 al final de los alegatos. Ayer, el efectivo no estuvo presente cuando el Tribunal adelantó la sentencia. Martín Navarro, su defensor, precisó que el imputado tuvo un inconveniente con la hija. Tras el cierre de la audiencia, el letrado adelantó a El Diario que apelará la sentencia.
El Tribunal explicó que llegó a la decisión por unanimidad. Destacó la labor de la defensa, pero entendió que los argumentos de la fiscal de Cámara María Carolina Castagno tuvieron más asidero con los hechos y sostuvo que la postura de la Fiscalía es la correcta y aplicó la pena que pidió la funcionaria. En este sentido, los jueces desestimaron el pedido del defensor, que solicitó que se considere la absolución por la aplicación de la figura de desistimiento voluntario, y subsidiariamente, que se le aplicara una pena de ejecución condicional.
Pallavidini fue condenado por el delito de Robo calificado por el uso de arma de fuego y por su calidad especial de autor, en carácter de tentativa.
Se le imputó que el 13 de junio de 2012, aproximadamente a las 12.15, exigió a Beatriz Lidia Embom, quien se encontraba atendiendo el local comercial Drugstore Fratelli, en la planta baja del hotel Maran Suite and Tower, sito en calle Alameda de la Federación Nº 968 de esta ciudad, que le diera todo lo que tenía, mientras la apuntaba con su arma de fuego reglamentaria que detentaba por su condición de funcionario policial de la Provincia de Santa Fe, dándose a la fuga cuando la damnificada le señala un cartel que decía que estaba siendo filmado por cámaras de seguridad, siendo aprehendido por personal policial en las inmediaciones de calles Catamarca y Nux de esta ciudad.
