"Esto provocaba que se pegaran las llaves térmicas, y por ende, el recalentamiento de las líneas. Nosotros bregamos por la seguridad de los internos alojados, y para evitar males mayores, se dispuso el retiro de estos elementos", agregó.
No obstante, el director de la Unidad Penal señaló que se han iniciado compras de artefactos, de manera de paliar la situación esgrimida por los internos.
Por otra parte, "y debido al reglamento interno, cuando no se retira la comida, no se pueden recibir visitas. Por eso no pudieron ingresar familiares a ese pabellón".
Finalmente, Miotti informó que son alrededor de 420 los internos alojados actualmente, "siendo que tenemos capacidad para 320, 350. Pero la situación está controlada. No estamos viviendo una situación de superpoblación", dijo a La Voz.