“Sumarse es muy bueno, tanto para el beneficiario como para quien ayuda. Porque te llena. En palabras de la Madre Teresa, hay que dar hasta que duela , y es así: en estos 24 años todo es reconfortante”, dijo Zárate muy emocionada.
En tanto, la última semana abril, “estaremos recibiendo a los que deseen realizar la inscripción definitiva”.
Acerca del voluntariado, mencionó que “es uno de las instancias más importantes dentro del servicio, que tiene 60 años. Tiene una estructura, que gracias a eso perduró en el tiempo. La última vez que se abrió una convocatoria para inscribirse al curso fue en el 2019. Al momento somos 30 voluntarias y necesitamos, como mínimo, llegar a 45, para poder cubrir en cada turno las demandas”.
“El voluntario nació como contención: éramos el WhatsApp entre el niño y la madre, ya que ambos lloraban porque no podían tener contacto”, dijo al sumar que la ayuda material también es muy importante y “la gente de la ciudad provee muchas cosas”, comunicó.
Lo más importante es dar tiempo y contención
“Las voluntarias siempre tienen que tener una sonrisa, ser pacientes, pero hay que entender que muchas madres están realizando diversas acciones desde el dolor y necesidad”, explicó al sostener que “hay que tener un corazón muy grande, porque las voluntarias se encariñan con todos, padres y niños”.
Al ser consultada sobre el dolor, aseveró que es algo que “afecta mucho, pero si te quedas en tu casa sin pensar que alguien te esta necesitando es peor. Ir y ayudar es sentirse útil, poner un hombro, escuchar y ayudar”.
“El mejor psicólogo es el grupo: porque compartimos alegrías y tristezas, entonces vas a tu casa liberada”, agregó.
Finalmente, expresó : “La invitación es para todas las personas mayores de 21 años, que quieran venir para prender a cómo se forma una voluntaria. Para consultar deben asistir al Hospital San Roque".
