Según explicó la presidenta de la vecinal Karina Romero, los trabajos obedecen fundamentalmente a la necesidad de atender a una docena de personas que se movilizan con sillas de ruedas o que sufren alguna discapacidad o problema visual, que habitan en el barrio. En ese marco, se habían desarrollado años atrás unas cinco manzanas de veredas, a través de planes Argentina Trabaja, para garantizar la transitabilidad.
Teniendo en cuenta que no se pudo continuar con esa estrategia de trabajo, y habiendo quedado incompletos unos 40 metros sobre calle Crisólogo Larralde, se presentaron proyectos ante Desarrollo Social, para obtener financiamiento de mejoras para los barrios. "Entre las distintas gestiones que estábamos llevando adelante, consultamos en Infraestructura la posibilidad de realizarla bajo Esfuerzo Compartido; y nos apoyaron en la idea", indicó.
"Entendemos que las veredas se tienen que hacer cargo los frentistas, pero ese tramo estaba inconcluso e impedía el paso diario de nuestros vecinos. Y más allá que la obra se encuentra en el límite con la vecinal lindera, nos propusimos trabajar para mejorar la realidad de todos", destacó la dirigente vecinal.