De acuerdo a las estimaciones de la empresa estará finalizada en 15 días y tuvo una inversión genuina de la empresa del orden del millón de pesos. Se construye en un lote cedido ubicado entre la ex cementera de calle Estrada y el loteo del Colegio de Médicos Bioquímicos, y que "permitirá brindarle en el futuro a un lugar que nunca lo tuvo, cuando el Estado provincial y los vecinos lo decidan" para cubrir toda esa zona "donde la ciudad nació y que está cumpliendo 202 años de vida".
Según lo expresado por el presidente de la compañía, Alberto Gutiérrez en el día de ayer, esta posibilidad forma parte de un proyecto mucho mayor en el que están trabajando junto al Gobernador para continuar ampliando una red que en Paraná ya tiene 52.500 clientes, con unos 800 mil metros lineales de tendido y que suma con el aporte del Estado unos 20 mil metros anuales.
En breve el Ejecutivo provincial estaría disponiendo de los plazos administrativos para el inicio de una obra que se ha venido planificando y que consiste en la implementación de infraestructura gasífera en la zona de La Toma, con la instalación de cañerías de 90, 125 y 180 milímetros en calles Blas Parera y López Jordán, con las calles transversales llegando hasta el río y cubriendo una amplia zona que se ha visto masivamente poblada en los últimos años incorporando zona de ejido a la ciudad. De este modo, un gran número de habitantes podrán sumarse al servicio de gas natural en una inversión que rondaría los 20 millones de pesos.
Pero de acuerdo a lo expresado, la Ley de Contabilidad de la provincia prevé la posibilidad de incrementar o ampliar en un 40 % el plan de obras sobre lo licitado. "Es decir que si se realizó una licitación por 20 millones se podría ampliar la obra unos 8 millones más en otro lugar por este 40 % de ampliación, y entonces la implementación de las obras en la zona de La Toma podría complementarse con la necesidad que están teniendo los vecinos de Bajada Grande. Eso es lo que nosotros propusimos al Gobierno y de allí la instalación de la planta reguladora de Bajada Grande para que en un futuro pueda incluirse en el programa de expansión importante que en el últimos años ha tenido al gobierno como principal impulsor incorporando gran cantidad de habitantes a la red y al servicio", dijo Gutiérrez a El Diario.
Estimaciones
De acuerdo a la experiencia de la empresa, con el tiempo un promedio del 70 % de los vecinos es lo que termina sumándose a la red y hace la instalación a su domicilio. De este modo, de los 2.500 potenciales frentistas de Bajada Grande a la larga unas 2.000 familias podrían contar con el servicio. Éste no podría prestarse sino existiera esta planta reguladora ?del mismo modo que la energía eléctrica requiere una planta transformadora- y hay que incluir entre los futuros beneficiarios a escuelas, hospitales y entidades no gubernamentales que posee la zona.
Pero como esa inversión la realiza el gobierno provincial, habrá que esperar que se tomen las decisiones políticas al respecto y que comience el proceso de la zona de La Toma para que se complemente y tanto el oeste como el este de la ciudad puedan recibir el servicio.
