El director del Hospital de Niños, Osvaldo González Carrillo, detalló que la beba ingresó con un alto porcentaje de quemadura, casi el 80 por ciento del cuerpo. Además de (sufrir) quemaduras en vía aérea, por lo que está muy grave, tuvieron que amputarle los miembros.
En cuanto al pronóstico de la salud de la niña, el médico dijo que es crítico. González Carrillo explicó que en el hospital Orlando Alassia atienden a los niños que llegan con quemaduras, pero los grandes quemados se derivan a otros centros especializados. Si esta niña supera el primer estadío deberá ser derivada al hospital (Víctor J.) Vilela o al (Juan) Garrahan (Buenos Aires), que son dos centros de salud pediátricos de mediana y alta complejidad.
Por su parte, el padre de la beba que el próximo jueves cumple dos meses de vida contó que estaba sola en la cuna, la habitación matrimonial. Su madre había encendido una vela a un santo, la vela cayó y la quemó. Tardó en darse cuenta porque la puerta estaba cerrada, dijo por LT10. En cuanto a estas circunstancias, el doctor González Carrillo dijo que están averiguando las circunstancias. El padre de la beba agregó que no pudo hablar con la madre porque le agarró un ataque de locura.
