Sandoval, quien se encuentra detenido desde noviembre del 2013 por otra causa, fue procesado en este caso por el "delito de amenazas agravadas por el anonimato y uso de arma de fuego, abuso de armas y daño", y cumplirá el arresto domiciliario bajo custodia policial, según indicaron fuentes judiciales.
Cuando lo indagó la jueza Rodenas, Sandoval se declaró inocente y sostuvo que había sido involucrado en la causa mediante una acusación montada por el comisario Ronald Cuñé, jefe de la seccional 10 de Rosario.
En cuanto a Espíndola, que está procesado por los delitos de encubrimiento agravado en calidad de autor, es un policía de la misma comisaría detenido el 5 de diciembre del 2013 con una pistola no declarada en su poder, arma que, según peritajes, fue utilizada en el tiroteo a la casa de Bonfatti y en otros hechos delictivos.