La joven, que vivió durante nueve años en condiciones de esclavitud, ingresó en el Hospital Evita de Berazategui y permaneció allí varias semanas, hasta que se dispuso su "internación con acompañamiento de adulto", según consignó la Secretaría de la Niñez.
El caso se conoció, luego de que la jueza de instrucción María Gabriela Lanz rechazó un pedido de excarcelación de la pareja, imputada por "reducción a la esclavitud y la servidumbre" y "privación ilegal de la libertad", entre otros delitos.
A partir de la internación de la niña, que estuvo con la pareja bajo el régimen de "guarda provisoria" desde el año 2001, el organismo bonaerense trabajó en la "revinculación" con su hermana mayor en un centro de atención a jóvenes con discapacidad, según se informó.
"De las evaluaciones realizadas surge que su desarrollo físico y psíquico no es acorde a su edad cronológica, pero que tiene buen pronóstico de recuperación", estimaron los especialistas.
Luego de que una de sus hermanas logró dar con su paradero en el barrio porteño de Villa Lugano, la joven ingresó en la institución quilmeña el 17 de diciembre de 2013, donde inició un período de rehabilitación nutricional, física y psíquica, se detalló.
La investigación del caso se inició en 2001, cuando la madre biológica de la víctima, madre a su vez de otros siete hijos, la entregó, con intervención de un juzgado civil, a una pareja en la ciudad de Buenos Aires bajo el régimen de "guarda provisoria".
Al momento del rescate, los investigadores constataron que la menor de edad, de 15 años, estuvo encerrada en un garage con un perro y un mono, alimentada de levadura de cerveza, pan y agua, por lo cual se dispuso su inmediata internación.
