La joven de 27 años llamada Melania Capitán tenía más de 32 mil seguidores en Facebook y 6.500 en Instagram, plataformas donde a menudo subía fotos de su afición, a pesar de las duras críticas que recibía por parte de grupos defensores de los animales.
Mel Capitán era promotora de la caza entre las mujeres y los jóvenes. Participó en diferentes asociaciones y con la Oficina Nacional de la Caza. Una actividad que su padre le hizo amar desde pequeña y con la que se ganó miles de seguidores, pero también le trajo críticas.
La principal hipótesis es que la joven decidió suicidarse, según informa la revista Jara y Sedal en la que ella colaboraba. "Tomó este fatal camino por temas de índole personal", sostiene la revista, citando a fuentes cercanas a la mujer.
