Tras la reunión de los ministros de Exteriores de los países aliados, el secretario general de la Alianza Atlántica, Jens Stoltenberg, anunció su compromiso de asistir y apoyar al Ejército de Kabul durante el próximo año, manteniendo la presencia tanto en la capital como en algunas regiones del país.
En la sesión estuvo presente el ministro afgano de Asuntos Exteriores, Salahuddin Rabbani, que calificó la situación en su país de "mucho mejor de lo esperado".
"Tomaremos la decisión de prolongar la misión de nuestros monitores y consejeros de la misión Resolute Support (RSM) en Afganistán y discutiremos el nivel de las fuerzas involucradas en el proceso", dijo Stoltenberg. "Además, estudiaremos la posibilidad del inicio de una campaña de recaudación de fondos para la financiación de las Fuerzas Armadas de Afganistán para el periodo posterior a 2018", añadió.
"Tenemos presencia en Afganistán porque va en nuestro propio interés a la hora de luchar contra el terrorismo extremista", declaró Stoltenberg
Fuentes de la Alianza aseguran que la organización pretende que los países (no sólo de la OTAN) presentes en Afganistán aporten hasta cuatro mil 600 millones de dólares (cuatro mil 327 millones de euros) durante el período 2018-2020 para fortalecer la capacidad de las fuerzas de seguridad del país.