"Fue inesperado. Esperabamos buenas noticias, pero no nos dimos cuenta de que sería esto. Hablé con ella por unos segundos y la línea no era buena, pero sonaba muy feliz. Necesita recuperarse ahora", dijo su hermano Iman, según informa The Independent.
Asimismo, detalló que el valor de la fianza fue de u$s38 mil y que permanecerá con su familia hasta la fecha de la apelación de su caso, en la que se espera revertir la sentencia de un año de prisión por "difundir propaganda contra el estado" y que se desestime la acusación de espionaje. De ser hallada culpable de este último cargo, se sumarían seis años a su condena original.
Luego de su arresto, la Guardia Revolucionaria liberó al grupo de mujeres que fueron detenidas junto con Ghavami, pero ella fue retenida y acusada de dañar la seguridad nacional del país. Aislada en confinamiento solitario, llevó a cabo dos huelgas de hambre en protesta. Además, miles de personas firmaron una petición exigiendo su liberación.
"Todos saben que no hizo nada. Ni siquiera debería haber pasado los últimos cinco meses en prisión", agregó Iman.
