Ubicado en el tercer nivel de la torre, dice el blog, el apartamento privado de Eiffel no es grande, pero sí acogedor. En contraste con las vigas de acero industrial del resto de la torre, el apartamento estaba amueblado en un estilo sencillo y agradable para los científicos, dice el blog.
Las paredes estaban cubiertas de cálido papel pintado, y los muebles tenían estampados florales de algodón, maderas y había incluso un gran piano, creando una atmósfera cómoda a más de 300 metros del suelo.
A finales del siglo XIX, muchos quisieron visitar el lugar, pero Eiffel no se los permitió, ya que era su lugar de reflexión y pensamiento, aunque recibió allí a grandes mentes de su época, como Thomas Edison. Actualmente, el apartamento puede verse solo desde afuera, aunque todo sigue prácticamente cómo estaba.
