Sociedad La salud de los inundados

Baja el agua, pero crece la preocupación por las enfermedades en Santa Fe

Las enfermedades más comunes son leptospirosis, gastroenteritis, conjuntivitis, dermatitis y cuadros respiratorios. Preocupan posibles casos de dengue, ya que el exceso de humedad permitió en los últimos días la proliferación de mosquitos.
El descenso del agua acumulada por las intensas lluvias durante una semana en los barrios del norte de esta capital trae a la superficie la preocupación por las enfermedades que pueden aparecer, consecuencia de la inundación de las viviendas, el desborde de los pozos sépticos y una acentuada contaminación de las napas freáticas.
Ante esa situación, se reparten medicamentos contra leptospirosis y contra otros cuadros frecuentes en este tipo de circunstancias, como gastroenteritis, conjuntivitis, dermatitis y afecciones respiratorias.
A ello se sumó el expreso pedido de Salud provincial de extremar cuidados ante eventuales casos de dengue, ya que el exceso de humedad permitió en los últimos días la proliferación de mosquitos.
Para prevenir casos de leptospirosis, el Ministerio de Salud de la provincia de Santa Fe está entregando medicación oral a las personas que tienen agua en sus hogares desde el jueves pasado.
Andrea Uboldi, directora provincial de Promoción de la Salud, explicó que "la leptospirosis se contagia por el contacto con agua estancada y contaminada con orina de perros, gatos, vacas o roedores".
"Estamos entregando las dosis de doxiciclina en forma preventiva. Primero se les dio a las personas que están inundadas desde el jueves de la semana pasada. Si la semana próxima continúan anegados, se les dará una segunda dosis. Mientras tanto, también le vamos suministrando a los que tuvieron agua a partir del martes de esta semana. Si en la casa sólo hubo agua durante 48 o 72 horas, corresponde una sola dosis", precisó.
Ante otra consulta, Uboldi explicó que "durante la primera semana con agua estancada, las enfermedades más comunes son gastroenteritis, conjuntivitis, dermatitis y algunos cuadros respiratorios, como pueden ser broncoespasmos o laringitis. A partir de la segunda semana, los casos más frecuentes son de diarrea", detalló.
Entretanto, continúa el buen tiempo, lo que permite la solución temporaria de numerosos inconvenientes generados por los casi 500 milímetros que precipitaron en el centro-oeste santafecino.
El epicentro del desastre se ubica en la franja central, que integran los departamentos La Capital, Las Colonias y Castellanos, aunque persisten inconvenientes en parte de los departamentos San Martín (sudoeste), 9 de Julio y Vera (extremo norte).
Tratando de graficar la situación, el gobernador santafecino, Antonio Bonfatti , sostuvo que "ha llovido en siete días la mitad de lo que llueve en todo un año".
"Por tal razón tenemos todos los campos anegados, ya que el agua busca los arroyos y los ríos", sostuvo
El gobierno provincial comenzó la evaluación de los perjuicios económicos, teniendo en cuenta el cese de numerosas actividades y el deterioro de la infraestructura vial.
Al respecto, el mayor daño se produjo en la conexión Santa Fe-Rosario. El desborde del arroyo Colastiné provocó el corte de la autopista y de la ruta nacional 11, en ambos casos en jurisdicción de Coronda. En el caso de esta última, se espera que durante el fin de semana comience la instalación de un puente Bailey. Actualmente, el tránsito es desviado por un par de alternativas, lo que supone la extensión en 40 kilómetros el recorrido habitual.
El resto de la red caminera se va recuperando. Hoy es normal la circulación por las rutas provinciales 13 y 70, y las nacionales 19 y 34.
Fuente: La Nación
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