En declaraciones realizadas en las últimas horas, Agustín Pérez Fernández, uno de los creadores del videojuego, aseguró a la prensa: "La verdad es que teníamos la idea de lanzar un producto propio, que sea autóctono y nos haga sentir argentinos. Porque veíamos que la mayoría de los juegos tienen una estética extranjera o bélica, y queríamos dar un mensaje pacífico".
"Primero hicimos una investigación de las diferentes culturas precolombinas y elegimos la mapuche que ocupaba la región de la Patagonia. Encontramos unos jeroglíficos que nos encantaron y que iban bien con el juego"; agregó el vocero del equipo de Chimango Games.
Según pudo conocerse, el juego se practica con un solo dedo y la historia empieza con un chamán que está triste en la ciudad y crea un ritual que deriva en la salida de un pájaro de fuego que vuela por el aire y que debe esquivar diferentes obstáculos. El videojuego, que se lanzó hace dos meses para Android y iOS, ya tienen más de 2000 descargas.