La mujer, el día del hecho que la dejó en esta situación iba al hospital a hacerme un control por el lupus que tengo, enfermedad que es sistémica, o sea que está acompañada de otras: también tengo artritis reumatoidea y estoy anticoagulada.
El ilícito fue perpetrado en Bario Cáritas, en una parada de colectivo de Avenida Larramendi y Calle 1996. Al delincuente que se bajó de la moto para robarle yo le dije cómo estaba. Me vio en las condiciones en que yo estaba, pero siguió con su cometido.
Álvarez dijo que hacía kinesiología, aunque no la pude seguir por la ambulancia. Las calles están todas rotas, no se puede entrar. No hay luces en el barrio. Estamos abandonados, aseveró la mujer, haciendo alusión a la situación en que se encuentra el barrio.
Hoy tengo que depender de alguien para salir. Me hicieron un daño tremendo. Yo lucho por mi vida todos los días. Enviudé hace un año y dos meses. Doy apoyo escolar para poder salir adelante, confesó la mujer.
En el mismo sentido, manifestó que pese a todo, hay que seguir, pero da mucha impotencia ir a todos lados y no conseguir nada. Es muy difícil, porque los papeles no se mueven. Es increíble la burocracia que hay. Elonce.com.
