Espectáculos "Me encanta ser curvilínea"

Engordó ocho kilos para su último trabajo, pero ya luce sus curvas en esplendor

Luego de filmar con Will Smith y de actuar con Lito Cruz, Tamara Bella finalizó una película que la llevó a engordar más de ocho kilos porque así lo requería su personaje. Feliz en lo profesional, asegura estar sola.
Si bien lleva años como modelo desde que dio sus primeros pasos bajo el ala de Pancho Dotto, hizo trabajos como actriz y conductora. Lo cierto es que su rostro alcanzó popularidad hace un año, cuando contó un accidentado y fallido encuentro con el actor turco Ergün Demir. Luego del triste episodio, y desvinculándose de cualquier rumor que la relacione con el actor de Las mil y una noches, Tamara Bella (28) volvió a ser noticia recientemente, después de que le adjudicaron un romance con Tacho Riera, el galán de Los ricos no piden permiso. Sin embargo, la rosarina le escapa al tema amoroso mientras posa para el infarto con un escote híper pronunciado. Tras engordar alrededor de ocho kilos para un papel en una película, la hermosa morocha muestra sus curvas y cuenta su experiencia.

-¿Cómo es tu presente profesional instalada en Buenos Aires?
-Estoy muy feliz de vivir en Capital, dedicándome a lo que tanto amo. Desde acá me resulta más fácil y accesible, ya que viviendo en el interior la distancia me limitaba. Luego de la película de Will Smith me convocaron de varios lugares e hice cuatro videoclips como protagonista. Actualmente estoy haciendo muchas campañas publicitarias en fotos y comerciales. Además, estamos grabando para un programa de televisión próximo a salir que se llama EDM. Vivo en Buenos Aires, con mi hija Renata, que es mi motor, mi sostén, mi todo. Sí es difícil vivir? Ser madre soltera es difícil pero no imposible. Los hijos te dan la fuerza que necesitás cuando no sabés de dónde sacarla. Nos llevamos excelente y nos criamos prácticamente juntas, porque tenía 20 cuando fui mamá

-Y recientemente participaste en una filmación en la que tu papel requería que subieras de peso
-Sí. Filmé una película donde también fui protagonista y en donde me hicieron engordar algunos kilos por el personaje. Eran como ocho kilos, o un poquito más.

-Vos trabajás con tu imagen y como modelo. ¿No te dio miedo subir tanto?
-No me afectó, ya que en este momento de mi vida la actuación es mi prioridad y entendí que los actores somos un producto que modifican constantemente. Por ende no me molesta que me cambien el color de pelo ni que me exijan engordar o adelgazar, siempre y cuando sea para actuar. Con respecto a la actuación y las modificaciones del cuerpo te cuento que si la gran actriz Charlize Theron, a la cual admiro y por la que siento un profundo respeto, engordó trece kilos para la película Monster y ahora lo volvió a hacer para la película Tully, pero esta vez engordando quince kilos? el resto lo puede hacer tranquilamente.

-¿Querés quedar con el peso que tenés ahora?
-Me encanta ser curvilínea, pero sí proyecto bajar un poquito, ya que por naturaleza soy de menor peso.

-¿Cómo es eso de que Lito Cruz es tu padrino?
-El año pasado estuve en la Avenida Corrientes con la obra Jardín de otoño, en la que interpretaba a una señora mayor y gordita, papel para el que me avejentaban y me ponían relleno. Lito Cruz me dijo una vez: "Si podés interpretar este personaje significa que podés actuar". Después nos fuimos de gira con una obra en la que él era mi director y que se llamaba Simulacro de juicio por jurado. Interpretaba a una mujer que supuestamente había matado a su esposo pero la tenían que declarar inocente. "En este juicio si te declaran inocente soy tu padrino artístico", me dijo. Luego le pedí que estuviera en nuestra obra, en realidad le hice una apuesta: si Racing salía campeón él iba a estar en nuestra obra. ¡Y así fue! Así que los dos estuvimos muy felices. Luego de vernos muy seguido generamos un lazo familiar muy importante, no te digo de padre e hija, porque padre ya tengo y es mi todo? ¡pero casi! A la semana siguiente lo llevé a conocer Serodino, donde viven mi papá, mi abuela, mi hermana, mi tío y otros familiares. Lito y Will Smith son grandes personas.

-¿Sos muy familiera?
-Mi papá Adrián siempre fue mi manager nato, mi cómplice, mi guía en esta profesión que elegí y en la que me acompañó desde mi primer día, a los 13 años de edad, cuando comencé a dar mis primeros pasos como modelo de Pancho Dotto.

-Con tus curvas tan pronunciadas, ¿te gustaría hacer teatro de revista?
-Sí, claro. Me divierte la idea, me encantaría, y para el verano quizás tenga más novedades. Y siempre me voy a conducir el Miss Princess of the World, que se hace en Praga, así que a fin de año quizás vaya. Y teatro de revista me gustaría. Creo que cualquier chica argentina desea estar con alguna de las grandes figuras, como Moria Casán, Carmen Barbieri y con los capocómicos. Pero por sobre todas las cosas me gustaría mucho trabajar con Moria, mujer a la cual le tengo un grandísimo respeto, la amo porque se muestra tal cual es, como yo. Por algo nacimos el mismo día: 16 de agosto. ¿Será el destino?

Íntima
Si bien está soltera, disfrutando del trabajo y de su rol de madre, la bella morocha, al parecer, habría tenido un romance con el actor Tacho Riera. Y a pesar de no ahondar en el tema, Tamara escapa a las respuestas indirectamente dando por sentado que entre ella y el ex de Silvina Escudero algo hay.

-¿Qué es lo que más te elogian los hombres?
-Generalmente la gente me elogia los ojos y la mirada, creo que el secreto está en que mi hija es la luz de mis ojos.

-Actualmente, ¿estás en pareja?
-No. Estoy sola, y de ahora en más me voy a ocupar en estar con hombres un poco más grandes. Para nenes ya tengo a mi hija (se ríe).

-Pero se te relacionó con Tacho Riera
-¿Nico? Nos queremos mucho, pero estoy sola.

-¿Te dan ganas de enamorarte?
-No busco el amor. Creo que eso llega, pero funciono mejor sola. Generalmente, y de manera inconsciente, apunto siempre al hombre obsesivo, celoso y que me consume mucha energía.

-¿Cómo es eso de que de chica te cargaban en el colegio por ser linda?
-En realidad, sufrí el bullying en la época en que iba a la escuela cuando decía que quería ser modelo. Ahora ellos, los que me gastaban, son los cholulos que me piden fotos y compran las revistas.
Fuente: Paparazzi
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