El segundo salvado por el voto del público fue Matías, con el 23,1 por ciento de los sufragios. El suspenso llegó entonces, cuando faltaba conocer si quien debía salir del juego era Camila o Mariano. Antes de anunciar el resultado, Gran Hermano convocó a Camila al "cuarto rojo" donde la esperaban su novio Álvaro y su perra Olivia. "No sabés lo que los extraño", expresó ella, entre lágrimas.
Mariano también tuvo una sorpresa en el "cuarto rojo". Allí lo esperaban sus dos hermanas, de 12 y 15 años. "¿Para qué vinieron? Si yo le dije a la producción que no hacía falta", reaccionó él. Ellas le regalaron una torta. Además, le pasaron un video con saludos de parte de su abuela, que tiene 95 años. Ella es fanática de River y, sin embargo, dejó de ver al equipo de sus amores para mirar a su nieto Mariano en la tele.
Al cabo de un rato se encendió la luz del cuarto rojo y quien entró fue Mariano. Leyó la tarjeta que estaba dentro del sobre y se enojó: la indicación era que por una semana sería el encargado de todos los quehaceres domésticos y que tenía que traer a dos compañeros (un varón y una mujer) sin decirles qué les esperaba en el cuarto rojo. Mariano eligió a Eloy y Valeria. Una vez allí, los tres tuvieron que vestirse con uniformes que llevan la leyenda: "Pedime lo que quiera". El trío deberá hacerse cargo de todas las tareas de la casa. Si no cumplen, los tres quedan nominados. Para el caso de que Mariano fuera eliminado anoche mismo, se nombró como suplente a Fernando.
A las 23.25 se cerró la votación. Ya comenzado el jueves -exactamente a las 00.11-, Jorge Rial anunció la decisión del público, que eligió mantener en el juego a Mariano. Así, Camila se despidió de sus compañeros y abandonó la casa televisada.
