Según destacan medios como Marca, Pacquiao estaba interesado en una mansión de 930 metros cuadrados, en Beverly Hills, valorada en US$ 12,5 millones.
Pero el propietario estaba indeciso frente a la oferta del boxeador. Así que en la última movida, el filipino ofreció los cuatro boletos. Elsa Nelson, agente inmobiliaria de Pacquiao, declaró a USA Today que "no hay duda de que ayudó a convencerlos... Los dueños de la casa son aficionados al boxeo y a Manny, así que...".