Para hacer su papel, se preparó físicamente: "Bajé seis kilos, pero no fue por obligación, tenía la posibilidad de que un doble me reemplazara en algunas escenas, pero no me gusta que hagan las coas por mí. Tomé los cuidados, guiada por médicos y nutricionistas, seguí la dieta, entrené, reduje las cantidades y noté que comiendo menos me agarra mucho mal humor".
Además, adelantó que "hay una propuesta para un unitario dando vueltas", pero que no puede contar más y que por el momento, no volvería a hacer tira: "El año pasado, en Camino al amor, la pasé muy bien, pero extrañé mucho a Rufina. Ella tenía nueve meses y me la llevaba al canal, la tira es esclavizante, son muchas horas por día y con una hija chiquita se complica".
Mientras tanto, continúa su relación a distancia con el músico español, David Bisbal: "No tenemos tiempos estipulados para vernos, es como cualquier relación a distancia. Cuando nos veamos, depende de nuestro trabajo, de nuestras vidas. Todavía no me organicé para viajar, cuando nació Rufina, ella pasó a ser el centro de todo".