En esta oportunidad el destino elegido por Luli y su pareja, el abogado Cristian Cúneo Libarona, fueron las Islas Maldivas, un lugar soñado con extensas playas de arena blanca, palmeras y aguas cristalinas.
"Después de 25 horas y un JetLag arrollador... ¡Llegamos a destino!", escribió Fernández en su cuenta de la red social Twitter, donde compartió varias instantáneas de este paradisiaco destino.
Si bien Luli confesó que dejó de tomar sol hace años y que se cuida utilizando factor de protección solar 40, eso no la priva de disfrutar a pleno de la playa ya que con Cristian se levantan al amanecer para practicar surf, un deporte que realmente los apasiona.