Sin embargo, aclaró que "la inflación núcleo -que excluye precios de bienes y servicios estacionales y regulados- aún se ubica por encima de los niveles buscados por la autoridad monetaria".
Sostuvo, de ese modo, que "decidió mantener inalterada su tasa de política monetaria, el centro del corredor de pases a 7 días, en 26,25%".
La determinación de sostener la tasa sin cambios desde abril se encontró en línea con lo esperado por los analistas financieros del mercado local.
Según datos del INDEC, el costo de vida a nivel nacional aumentó 1,7% en julio, impulsado por alzas en los rubros salud, vivienda y transporte.
En la medición oficial acumuló durante los primeros siete meses un alza del 13,8%, contra el 14% de los sondeos privados.
El ente oficial puntualizó que la inflación núcleo con el 1,8%, se ubicó levemente por encima del promedio, al acumular en 7 meses un avance del 12,6%.
El organismo que conduce Federico Sturzenegger aseguró que continuará con "un claro sesgo antiinflacionario para asegurar que el proceso de desinflación continúe hacia su objetivo de una inflación de entre 12% y 17% durante 2017 y de 10% y 2% para 2018".
Recordó que el 10 de agosto se publicó el Índice de Precios al Consumidor (IPC) nacional del INDEC y "como era esperado por los aumentos de precios regulados que tuvieron lugar en el período, la inflación de julio resultó superior a la de junio".
Días atrás, Sturzenegger había ratificado que iba a seguir apelando a tasas de interés agresivas para combatir la inflación.
"La persistencia de la inflación núcleo nos convenció de que debíamos seguir firmes en esa postura y de hecho el día de hoy creemos que es indispensable mantenerse para acercar la desinflación a los valores que buscamos", había evaluado el jefe del Banco Central.
En la licitación mensual de Lebacs, la autoridad monetaria había sostenido la tasa en 26,5% para el corto plazo.
Sucedió luego de las elecciones primarias, cuando renovó parcialmente el vencimiento de 534.983 millones.
