Las promociones y ofertas a las que están apelando las grandes cadenas de supermercados todavía no lograron cambiar la tendencia, y según la medición de CCR, en septiembre el llamado canal moderno (híper y supermercados y locales de cercanía de las grandes cadenas, como Carrefour Express y Día%) tuvo el peor registro del año, con una caída interanual en unidades del 8,1% (en agosto la baja había sido apenas más moderada, del 7,8 por ciento).
El panorama para los comercios tradicionales fue igual de malo. En septiembre, las ventas de los almacenes y los autoservicios chinos cayeron un 6,7% (en línea con la baja del 7% de agosto), mientras que en el acumulado de los primeros nueve meses del año el retroceso del sector llegó al 4,1 por ciento.
Por rubros, para los supermercados todas las grandes categorías exhibieron resultados muy malos en materia de ventas, en muchos casos con bajas interanuales de dos dígitos, como sucedió en bebidas con alcohol (-10,9%), artículos para el hogar (-10,8%) y cosmética (-12,8 por ciento).
La recesión no perdonó ni siquiera a los rubros más básicos, como los alimentos de almacén -una categoría que reúne a pastas, aceites y azúcar-, que cayeron un 6,6%, mientras que las bebidas sin alcohol tuvieron una baja en la demanda del 6,5% y los congelados descendieron un 6,3 por ciento.