Los goles del equipo jujeño fueron anotados por Milton Céliz y Sebastián Ojeda, en el segundo tiempo; mientras que la visita se había puesto en ventaja en la primera etapa por un tanto en contra -de cabeza- de Federico Haberkorn.
El primer tiempo fue de trámite parejo y tuvo escasa relevancia en cuanto al buen trato de la pelota ya que ninguno de los dos marcó criterio para avanzar con peligro hacia los arcos. A los dos les costó hacer juego del mediocampo.
Cuando todo pintaba para un empate, antes del entretiempo, llegó una jugada fortuita a los 39 minutos. Un tiro de esquina ejecutado por el Pulga Rogríguez que parecía no implicar mayor riesgo, fue cabeceado hacia su arco por el delantero Ferderico Haberkorn, decretando el triunfo parcial de la visita.
En la segunda etapa, el Lobo jujeño se mostró más ambicioso y golpeó en los momentos justos para adjudicarse el triunfo del clásico del Norte.
El empate fue obra del delantero Milton Celiz, que sacó provecho de una vacilación de la defensa local y desde fuera del área sacó un violento remate contra el palo derecho del arquero Cristian Luchetti.
La otra conquista que selló el resultado llegó a siete minutos del final cuando la pelota cayó en el área luego de un córner y la punteó del volante Luis Peralta hacia adentro donde apareció el defensor Sergio Ojeda, quien de cabeza abrochó el resultado.
Gimnasia estaba urgido por un triunfo para no perder terreno en el campeonato y para dar oxígeno a su entrenador Sebastián Méndez, quien se fue reconfortado porque el equipo volvió al triunfo luego de tres fechas.
La visita, que no jugó al nivel que mostraba en el torneo, tuvo dos ocasiones claras después del empate y triunfo parcial de los jujeños (remates en el palo y en el travesaño) que pudieron modificar la historia del partido.
