"Sabía que iba a ser un partido difícil y se complicó un poco de más. Lo lamento por Feli porque lo conozco desde que somos chicos. No es bueno ganar de esta manera y más con alguien que conozco desde chico", reconoció Báez en diálogo con ESPN. "Quizá un poco de nervios de más. Más allá de todo lo pasado es importante poder pasar de ronda", agregó Báez, que jugará con el ganador del encuentro entre Daniil Medvedev vs. Christopher O'Connell.
El ex número 1 del mundo en junior está demostrando como profesional sus credenciales y extendió una excelente racha: suma 12 partidos invicto que le permitieron ganar en las semanas previas al US Open las coronas de los ATP de Kitzbühel y Winston-Salem.
A los 22 años está 32° del ranking, acumula cuatro títulos (tres este año) y dos finales. Esas cifras le permiten igualar las vitrinas de Diego Schwartzman, Carlos Berlocq, Federico Delbonis y Guillermo Durán, por citar algunos casos que también alzaron cuatro copas a lo largo de sus trayectorias.
Báez es el único argentino en dicha instancia y junto a Nicolás Jarry, chileno, son los únicos sudamericanos. Su rival saldrá de Medvedev-O'Connnell.