El director técnico de la Lepra destacó que "desde el final de la entrada en calor hasta el comienzo del partido pasaron 35 minutos". Además, analizó lo que les sucedió a sus dirigidos y añadió: "No es una excusa. Fuimos un equipo que no tuvo demasiada reacción, sobre todo en el segundo y tercer gol".
Con respecto a las conclusiones, el entrenador se mostró sin energías y abatido por lo que había sucedido. "Mucho más para agregar no hay, porque todo lo que se pueda decir quedará en la nada. A veces se dan este tipo de circunstancias, donde no se puede salir", manifestó.