Deportes

"Fui un afortunado toda mi vida, no sabía qué iba a pasar conmigo", dijo Ginóbili

El bahiense vivió su noche mágica en el AT&T Center de San Antonio. Agradeció a su familia, a los Spurs y a la Generación Dorada. "No me imaginaba estar ni cerca de donde estoy ahora", dijo el argentino.
"Fui un afortunado toda mi vida, no tenía ni idea qué iba a pasar conmigo".
Foto: "Fui un afortunado toda mi vida, no tenía ni idea qué iba a pasar conmigo".
Las palabras de sus ex compañeros habían pasado, también el video con sus imágenes Entonces, le llegó el torneo de agarrar el micrófono a él, a la estrella, el homenajeado: Manu Ginóbili.

Arrancó con el principio de su carrera: "No tenía ni idea qué iba a pasar conmigo, Pero en un abrir y cerrar de ojos tengo a estas leyendas aquí conmigo. Estoy muy agradecido de todo esto, quisiera darles la mano a todos ustedes (por la gente). Fui un afortunado toda mi vida. Quiero reconocer de dónde salí y la suerte que tuve. Nací en una ciudad (Bahía Blanca) que vive el básquet de una manera especial y diferente".
"Esto es un deporte colectivo, quiero agradecer-arrancó nuevamente-. No tuve la oportunidad de hablar con mucha gente a la cual darle las gracias. Llegó el momento ahora. No soy melancólico, estoy bien con la decisión que tomé de retirarme. Quiero agradecer primero a todos ustedes (los fans). Llegué a San Antonio y no sabía nada de esta ciudad, tenía muchas dudas. Qué sabía si ustedes querían tenerme a mí... Estaré toda mi vida agradecido".Los "thanks" se transformaron en "gracias", porque habló en español: "A ustedes (los hinchas). Por ahí pueden pensar que en mi carrera no influyeron, pero estando lejos sabía de sus esfuerzos por mirar mis partidos, acostarse a las 3 de la mañana. Sabía de sus gritos a la TV, sus insultos, festejos, todo eso un poquito me llegaba y me empujaba un poquito más".

También les agradeció a los Spurs y, fundamentalmente a sus compañeros de Selección: "Sabía que en cada cancha íbamos a ser un grupo unido que nos íbamos a cuidar las espaldas, que la íbamos a pasar bien si ganábamos y, si perdíamos, mejor, porque nos íbamos a decir cosas invalorables".

También quien fuera escolta, de 41 años, tuvo palabras elogiosas hacia sus padres. Y les habló a sus tres hijos que lo escuchaban, casi dormidos por la hora... "No sé si entienden algo de lo que está pasando acá... Solo quiero que sepan que no estoy triste, si lloro un poquito es de felicidad. Los quiero más que nada en el mundo".

Y finalmente, las caricias para su mujer: "Gracias por aguantar mis obsesiones, que la siesta, el silencio, la comida, los partidos. Gracias por bancarte veranos permitiendo que me fuera a jugar".

En esta nota

Emanuel Ginóbili
El comentario no será publicado ya que no encuadra dentro de las normas de participación de publicación preestablecidas.

NOTICIAS DESTACADAS